Al
despertar por favor no te asustes
Puedes gritar que no hay nadie cerca
Hazme saber si te apretan las cuerdas
No quiero herir tus hermosas muñecas
Por tantas veces que me despreciaste
pagarás
Y lentamente te despojo de
tus prendas intimas
Voy avanzando sobre tus tesoros tus terrenos
Mi lengua va posandose en tus labios llenos de humedad
Tu cuerpo es como un fruto que devoro que penetro. |