X CORREDOR DE
LAS IDEAS - PONENCIA
POR LA MIGRACION DESDE LAS INSTITUCIONES EDUCATIVAS A COMUNIDADES DE
APRENDIZAJE PERMANENTE SUSTENTABLES
Por Alfredo Armando Aguirre * Argentina
PALABRAS CLAVES: comunidad de
aprendizaje sustentable - aldeas ecológicas - democratización permanente - amplia
participación - tradición e innovación
DESARROLLO DE LA ESTRUCTURA
ARGUMENTATIVA
La presente comunicación, intenta
balbucear una propuesta. Con el verbo balbucear, intentamos significar que la
misma tiene el sentido de un esbozo, al modo que dicho término se lo emplea en
Arquitectura.
En los ámbitos de las Humanidades, como
precipitados de los descubrimientos de la “nueva Física”, ya es posible
arriesgarse a declarar que todo flujo o fluencia vital esta signado por la
diversidad, la complejidad, la contradicción, la imprecisión, la incertidumbre
y el descontrol.
Más la diseminación de esa batería
conceptual por los ámbitos académicos, tarea que se vienen haciendo en forma
creciente al menos en las ultimas tres
décadas, no necesariamente comporta una incorporación inmediata a ciertas
“corrientes Principales”(maistreams) que han sedimentado en estructuras donde
predominan interactuando conflictivamente;
por un lado el Derecho Romano; los Evangelios y las gramáticas castellana o
portuguesa; y por otro las variantes
mecanicistas propugnadas por Newton, Descartes, Laplace y sus seguidores.
Dicho en trazos muy gruesos: las
estructuras configuradas sobre la “Física Clásica”, se muestran poco permeables
a conceptos decantados desde “la Nueva Física”.
Nuestra propuesta está basada en el caso
argentino. Tal vez, podríamos considerarla extrapolable parcialmente al Cono Sur de
Sudamérica.
En las décadas recientes se ha
consolidado una fuerte migración de los países limítrofes a la Argentina, con
la excepción de Brasil, así como del Perú, que no tiene fronteras físicas con
Argentina.
Esto comporta una incorporación de
capital humano que por un lado ha recibido algun nivel de instrucción en los
sistemas formales de sus países de origen, y por otro lado es portador de idiosincrasias
que refuerzan las pautas culturales de la parte de la población argentina, que
evidencia constituir una mayoría creciente, con ancestros precolombinos y en
menor medida afros. Tal vez el sesgo precolombino no sea aplicable a la
migración uruguaya.
Nuestra propuesta que supone un juicio
de valor negativo sobre el estado de cosas existentes no sólo circunscripta al
ámbito educativo, sino al contexto multidimensional en el que se desenvuelve.
La propuesta, está fundamentada en vivencias
propias, adquiridas como alumno( Iniciamos nuestra educación formal en 1954),
como ex alumno y como docente( Creemos haber finalizado nuestro ciclo
formal como tal en marzo del 2009); así
como en análisis propios decantados de las antedichas vivencias ( la mayoría de
los cuales están accesibles en el sitio: https://choloar.tripod.com/trabajos.htm ) , y en análisis ajenos (argentinos y extranjeros:
Saúl Alejandro TABORDA; Bill ELLIS; Ivan ILICH, y Roger SPERRY, entre otros).
Con nuestra propuesta aspiramos a
consolidar, aportes que últimamente hemos venidos volcando en la lista de correos
NOVEDUC, bajo el auspicio de la revista “Novedades
Educativas “, de Buenos Aires.
Nuestro desarrollo aspira a insinuar
caminos para que las actividades de aprendizaje puedan preparar a las personas
para abordar el traumático cambio que suponen las triples y entrecruzadas
crisis ecológica, energética y alimentaria en curso.
Somos de la opinión que la reciente
crisis financiera que tuvo como epicentro Wall Street, no es mas que uno de los
efectos, de la triple crisis antes mencionada, opinión muy compartida por
sectores de los Estados Unidos de Norteamérica, cuyos contenidos (en idioma
inglés) no fluyen por los grandes medios de comunicación, pero que se diseminan
por intermedio de Internet, la que se atenúa en los países hispano luso
parlantes por la barrera idiomática como por reservas ideológicas
Se dan, a nuestro entender dos elementos
de soporte, que dan sustento a las presentes consideraciones:
1) A nivel continental, se registra una
estabilidad institucional democrática que ronda en promedio poco más de dos
décadas, luego de la conculcación del estado de derecho en casi todos lo países
de Sudamérica. Esta situación previa de anomalía institucional proyecta
secuelas a la democracia en curso, incluido el retraso de las nuevas
incorporaciones conceptuales, y la persistencia de las estructuras
retardatarias a esas incorporaciones.
2) A nivel global, y con un ostensible
impacto en nuestra área geográfica, se agrega la impronta técnica, que supone
la irrupción de las llamadas Tecnologías de la Comunicación y la Información (TICs).
Pese a que las distintas y crecientes aplicaciones de las mismas ya se van
incorporando a la cotidianeidad, particularmente de los sectores infanto
juveniles, todavía no parecen asumirse todas las implicancias que comportan ingentes
cantidades de información, con casi inimaginables velocidades de cálculo, y
circulando en velocidades cercanas a la velocidad de la luz, al menos en los
conductos troncales. No seria redundante consignar que las TICs en sus
manifestaciones más actualizadas, reformulan y potencian tecnologías
preexistentes como el telégrafo, la radiodifusión, el cinematógrafo y la
televisión.
Las estructuras educativas formales, con
sus comportamientos burocratizados sustentados en la inercia conceptual
mecanicista, no parece mostrar la misma plasticidad que los alumnados en orden
a incorporar el torrente nocional que estos
van absorbiendo con avidez y espontaneidad.
Nos arriesgaríamos a asumir que la
asimilación de las TICs, por parte de las estructuras docentes hace pasar la
misma por la criba de las conceptualizaciones preexistentes, y procesa con
dificultad, la lógica interna que dimana de las TICs. A sólo titulo de ejemplo,
cabe apuntar que todo el potencial que emana de la noción de “Gestión de
conocimiento” (KM), uno de los subproductos de la dinámica TICs, sólo es
receptado en ámbitos muy acotados.
El núcleo central de nuestra propuesta
estriba en transformar en comunidad de aprendizaje sustentable permanente a
cada edificio escolar o ámbito físico que oficie de tal, asignando a esa
comunidad la máxima autonomía tanto en la elaboración de los currículos como en
la gestión, sin desmedro del apoyo logístico de los poderes públicos.
Cada comunidad sería como el bloque
mínimo de una red neuronal altamente sensible a sus contextos inmediatos, asumiendo
que lo son parcialmente, con las habituales excepciones. Ello se enmarca en un esbozo de sociedad concebida como un sistema de aldeas ecológicas parcialmente autosustentables.
Vale acotar que el presente flujo o fluencia
vital argentino, se desagrega en 1610
asentamientos urbanos; 1440 de ellos menores a los 50.000 habitantes y
superiores a los 600; además de los núcleos menores y las áreas rurales, de
similar magnitud. El alumnado regular de esta población está siendo actualmente atendido por
aproximadamente ochocientos mil docentes, distribuidos en alrededor de 40.000
escuelas.
Cada comunidad en un contexto de
democratización permanente y de amplia participación generaría sus propios
currículos conjugando tradición e innovación y hasta podría elegir a los
directivos para gerenciar los mismos, (tal como se hace en el estado
brasileño de Río Grande do Sul).
El párrafo precedente amerita
desplegarse, atento lo consideramos el aglutinante de la presente comunicación.
La generación de los currículos a cargo
de cada comunidad educativa, sería algo análogo a la noción de “presupuesto
participativo”. Así, en cada una de las comunidades educativas, los currículos
serían elaborados y aprobados por un colectivo integrado por representantes de
los directivos, los docentes, los no docentes, los padres de los alumnos, los
ex alumnos del establecimiento, representantes de las entidades de bien público,
medios de comunicación locales, así como los docentes jubilados del entorno
cercano del edificio escolar o del que haga de tal, y del Municipio respectivo.
La circunstancia que algunas implementaciones del “presupuesto participativo”
hayan resultado insatisfactorias, no quita potencia al concepto, a los efectos
de nuestra ponencia.
En el caso de los núcleos de aprendizaje
donde concurran adolescentes o adultos, también habría de participar los representantes
de los mismos.
Este último esquema es de los que fueran
intentados implementar en la década del Veinte, por uno de los referentes de la
Reforma Universitaria de 1918, Saúl Alejandro Taborda, a la sazón Rector del
Colegio Nacional de la Plata, y por proponer tal iniciativa debió alejarse del
cargo.
Los participantes en esta suerte de
“Currículo participativo”, actuarian a título honorario sin percibir
remuneración alguna.
Entendemos que bajo el apotegma
“Conjugar innovación y tradición”, metodologías como las aquí consideradas (Que
van muchos más allá de lo que se conoce como “Consejos Escolares, en la provincia argentina de Buenos Aires, o las
“cooperadoras escolares”, existentes en todas la provincias(estados)
argentinas), darían la ductilidad imprescindible para procurar un equilibrio
dinámico entre lo que la comunidad cree que debe impartirse y las nuevas
concepciones pedagógicas que desde los núcleos académicos se diseminan , potenciadas
por las posibilidades de las TICs. Cada persona que participe voluntariamente
en estas instancias de legislación y ejecución, aportaría lo adquirido sea a
través de su instrucción formal, como de la cultura adquirida por el solo hecho
de existir.
Habría que enfatizar el papel de los
padres, que en el caso argentino asignan mucho valor a la educación de sus hijos.
Con los altos índices de alfabetización formal, casi todos los padres tienen
experiencias como ex alumnos. Y aún si los hubiera no alfabetizados (conceptos
muy relativizado últimamente), estos también podrían aportar sus saberes implícitos
(como la lenguas y las culturas precolombinas).
La participación voluntaria de los padres
(o eventualmente de abuelos o tíos) de los alumnos es el control de calidad mas
adecuado para la formación de sus hijos. Lo último suena casi como una obviedad,
aunque muchas veces las estructuras docentes con la mejor de las voluntades,
han pretendido reemplazarla. Debería facilitarse la concurrencia de los padres
a observar las actividades de aprendizaje, sin interferir en el desarrollo de
las mismas.
En nuestro esquema no se conciben
docentes “absolutos “y “docendos “absolutos”. A lo sumo algunos serán
preponderantemente docentes y otros preponderantemente docendos, admitiéndose
variante intermedias simultáneas o consecutivas.
Y a las funciones de “currículo participativo”
de cada comunidades se agregan tareas de mantenimiento y reparación de las
instalaciones físicas, así como las tareas de extensión y el uso comunitario de
las instalaciones físicas.
No se nos escapa, que esto genera por el
solo hecho de enunciarlo, reacciones, de aquellas de PARETO tipificaba como
“agregados de la persistencia”. No debe soslayarse que en países como Argentina
el ciclo básico es obligatorio desde 1884, y en fecha reciente se extendió la
obligatoriedad al ciclo medio (Consideramos esta obligatoriedad potencialmente
inconstitucional).
Hasta se podrá argumentar que esto producirá
“politización”, como si se considerara que es
posible realizar actividades humanas trascendentes sin algun sesgo político.
Sin soslayar que la propuesta se pone a
consideración en el decurso de las interrelacionadas crisis, vale recordar que
el sistema del que proponemos se migre, ha venido funcionando soportado por la energía
proveniente de los hidrocarburos (sólidos, líquidos y gaseosos), mientras que
la propuesta de sustitución, se diseña
sobre la hipótesis de al menos la minimización de la disponibilidad de
combustibles de ese origen.
Como una de las alternativas para
reconvertir las matrices energéticas pasa por la revalorización y actualización
de la tracción a sangre humana y animal, esto se proyecta a nuestro esquema en
que los entornos de cada comunidad de aprendizaje estarán dados por la
capacidad de trasladarse mediante tracción a sangre. Y lo mismo para la
interconexión entre las comunidades de aprendizaje vecinas. Allí cobra sentido,
lo de red de conexiones neurales funcionales a la descentralización y
refractarias a los esquemas centralizados y remotos
Las
agencias públicas redefinirían sus competencias, para abocarse al apoyo
logístico; a la certificación de los saberes generados desde las comunidades; a
la orientación vocacional en función de las necesidades de la sociedad, y a la
supervisión pedagógica de los institutos de formación docente, así como los
esquemas de actualización y perfeccionamiento docente.
El apoyo logístico comprendería en un
listado no exhaustivo: el aporte de los recursos financieros para pagar las
remuneraciones y las cargas sociales del personal, directivo, docente y
auxiliar; el material didáctico; el pago de los servicios públicos; los
alimentos allí donde se los suministre, así como el financiamiento de las
tareas de mantenimiento y reparación.
Tratándose de fondos públicos las tareas
de auditoria gubernamental son insoslayables.
Va de suyo que lo propuesto abarca tanto
a los colegios estatales, como a los privados sostenidos por subsidios
gubernamentales. El financiamiento, como la fiscalización de su adecuada
aplicación, resultan en este esquema funciones indelegables de los poderes
públicos (Legislativos y Ejecutivos). Estos poderes deberían obligarse a financiar las
actividades de enseñanza – aprendizaje, a todas las familias que deseen
instruir a sus hijos, o a todos los adultos de deseen acrecentar sus saberes
Insistimos que lo que aquí se postula
transita por el camino del esbozo, reconociendo que por aquella idea jungiana,”que
la realidad no puede encerrarse en formula alguna”, las puntillosas
planificaciones o las ingenierías de detalle, tienen en nuestro opinión un
sesgo liberticida.
Estamos mas cerca de aquel José
Hernández, que en su conocido “Martín Fierro”, dijo que “Hasta el pelo más delgado
hace su sombra en el suelo”; y que en su poco conocido “Manual de estanciero”, escribió:”Todo
el mundo es escuela”.
Los esquemas verticales, centralizantes
y compulsivos, vigentes, se relativizan al intentar aplicarse al universo de
las 40.000 escuelas en el caso argentino.
Esos mismos esquemas son muy similares a
los que se pusieron en marcha en el último tercio del siglo XIX, cuando regía
en plenitud el paradigma mecanicista, cuando la clase dirigencia compartía la
creencia que las cosas se podían controlar. Al menos a nivel ritual esa inercia
continua, neutralizando objetivos mas personalizantes para la educación como lo
son generar pensamientos críticos y de calidad.
A los efectos de generar pensamientos
críticos y de calidad estimamos más funcional generar alternativas de
aprendizaje altamente sensibles a los respectivos contextos circundantes, con
características como la descentralización, la voluntariedad y la participación
y la horizontalidad, conceptos estos que en concepciones holísticas apreciamos
en interrelacionante sinergia.
Lo insinuado precedentemente a nivel de
esbozo, supone decisiones politicas de diferente nivel.
La circunstancia que en lo países
federales del subcontinente, todo el ciclo no universitario sea competencias de
los estados o provincias, a los efectos institucionales se equipara con los
países de la misma subregión con sistemas unitarios de gobierno.
Es decir que cambios como los sugeridos
se procesarán en el decurso de la lucha permanente por la preeminencia.
No se nos escapa que esta migración
comporta un desapoderamiento de ciertas situaciones que han generado intereses específicos,
y el empoderamiento de instancias que en algun modo están larvadas, funcionando
como anticipos o pródromos que lo que se propone (que han asumido paradigmas
donde se asume como ingredientes de lo real diversidad, la complejidad, la
contradicción, la imprecisión, la incertidumbre y el descontrol).
A veces puede resultar casi inconducente
desde lo académico plantear cambios que comportan decisiones políticas; mas en
el pasado relativamente reciente del quehacer humano ello no ha sido óbice para
que se sucedieran propuestas muchas veces preñadas de utopismo.
Esas propuestas que nos precedieron, nos
estimulan a poner en consideración la nuestra, la que quizás no tenga mucho de
originalidad, pero esta imbuida del mismo espíritu de las que se nos anticiparon
con la esperanza de contribuir mediante la educación a una alta calidad de vida
para las personas involucradas en ella.
(Redacción finalizada en Buenos Aires,
el 15 de julio de 2009)