"Vampiros"
        (El final) 
        La última película de Vampiros ha
        sido ya el advenimiento del fin de una historia que de
        tanto repetirse para mal, ha hartado; ¿a quien?, pues a
        los que sentimos que los Vampiros no son una panda de
        chupasangres, a los que pensamos que el Vampiro de HOY en
        día y sobre todo del FUTURO, es tan solo un Ser
        Extraordinario y por lo tanto Superior. 
         
        La película de título tan simple, "Vampiros"
        es un insulto más donde por encima de todo está ese
        "espíritu" del yanqui enorgullecido por su
        creencia de ser omnipotente; que es capaz de poner en el
        altar de las virtudes la decadencia más brutal y más
        bestial, sin que eso suponga problema alguno; sexo,
        drogas y rocan rol en el modo más macarra. 
         
        Los vampiros son sanguijuelas, según en esta película,
        película por otra parte basada en una "novela"
        de alguien no solo desconocido, sino desconocedor del
        Vampiro Posmoderno; desconocedor de un Vampiro que lo ES
        porque tiene Poder, un Poder evidentemente por encima del
        ser humano, pues el ser humano, -así como el Vampiro
        verdadero se eleva-, el otro, el humano, se rebaja, y no
        quiere, por nada del mundo, que haya nada por encima de
        él.  
         
        "Vampiros" podría haber estado muy bien porque
        tenía una ligera buena idea; ni las cruces, ni los ajos
        ni ninguno de los tópicos hacen que el vampiro perezca,
        pero la luz del sol sí. Existe una cruz, una cruz negra,
        que realizaría un acto exorcista alrrevés, ?¿, que
        daría el poder al Vampiro de permancer con toda
        naturalidad a la luz del Sol. 
         
        Nada de eso se consigue por lo de siempre: la panda de
        matavampiros que son muy buenos ellos, y sobre todo, muy
        yanquis ellos y por lo tanto, lo dicho, muy poderosos;
        unos poderosos que hablan mal, que están obsesionados
        por la fornicación, que beben como cosacos y que todo se
        basa en una venganza personal de uno de los jefes
        matavampiros. 
         
        No merece la pena contar nada más; mientras no se hagan
        películas donde NO haya actores famosos, sino donde haya
        personajes que cuenten de verdad lo que es un Vampiro de
        hoy en día, no habrá más películas de Vampiros. 
         
        Nadie se atreve a continuar la saga de Anne Rice
        -Entrevista con el Vampiro-, por lo tanto, habrá que
        esperar a que la moda de todo, pase.  
         
        Quirón 
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