Gonzalo Rodriguez murió el sábado por la mañana en el circuito de Laguna Seca en el transcurso de los entrenamientos libres de la decimoséptima prueba del Campeonato CART, cuando se bloqueó el cable del acelerador de su Lola-Mercedes, de la escudería Penske, y se estrelló contra las protecciones de la curva del sacacorchos a unos 260 km/h. En la actualidad, el querido piloto uruguayo ocupaba la segunda posición en el Campeonato Internacional de Fórmula 3000, cuyo desarrollo coincide con la mayoría de los grandes premios europeos, y dentro de quince días debería disputar la última prueba de la temporada en el circuito alemán de Nurburgring (Alemania). |
