No descuides vuestra propia vida.
Cuando la plaga de la enfermedad se propagó por todo el país, muchos médicos e investigadores comenzarón a trantar de encontrar el antido que pudiera curar a los enfermos de este gran mal y a la vez la vacuna que permitiera proteger a todos a quellos que aun no se habian contagiado, el trabajo en esta busqueda hacia que los investigadores dedicaran todo su tiempo.
Al fin un hombre logró encontrar la cura para este mal y de inmediato inició la aplicación del antido a todos quellos contagiados y la aplicación de la vacuna a todos aquellos que aun no habian sido contagiados.
Una tarde decidió hacerse el mismo el examen que le permitiria saber si él estaba contagiado, la sorpresa fue que el mal ya estaba muy avanzado en su organismo y era demasiado tarde para aplicar la cura, lastimosamente despues de haber encontrado el remedio para aquel mal este hombre murió contagiado del mal mismo.
¿Cuantos de nosotros ya hemos encontrado el remedio a todos los males y problemas de este mundo?
¿Cuantos de nosotros afanosamente predicamos a otros del evangelio y tratamos de alejar a otros tantos de las garra del diablo?
Pero ¿y nuestra vida?, ¿estamos haciendo uso nosotros mismos de la medicina que damos a otros?
No esperemos que sea demasiado tarde, sigamos predicando el evangelio de Nuestro Señor Jesucristo y sacando a otros de las garras de satanas, pero no nos descudimos nostros mismo, hagamonos constantemente "el examen" y constantemente apliquemos el antido de la oración y la confesión de nuestros pecados al único que puede perdonarnos, a la única medicina que permite ser Salvo y limpio de todo pecado "LA SANGRE DE CRISTO"
 
  Com. Gehovani Flores.
Lucas 6:41-42
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