CARHUAMAYO: EFICIENCIA DE LA COMUNIDAD CAMPESINA EN LA PUNA

 Andrés Huguet Polo

 Texto publicado en el libro

SOCIEDAD ANDINA: PASADO Y PRESENTE,

Contribuciones en homenaje a la memoria de

César Fonseca Martel,

Compilador Ramiro Matos Mendieta,

FOMCIENCIAS, Lima, 1988

 

Uno de los problemas de importancia en la comprensión del medio andino y particularmente en el entendimiento de la organización campesina es resolver el rol que le compete a la comunidad como alternativa económica y social. El impacto del capitalismo y la economía de mercado en los contextos de explotación semicolonial han arrojado en diversos espacios resultados de desintegración y descomposición de las organizaciones tradicionales de los campesinos. La ruptura de la "comunidad de indígenas" es normalmente resultado esperado como consecuencia de la erosión capitalista.

No obstante, tal proceso comporta, si no situaciones excepcionales, por lo menos realidades multiformes. La reformulación de la vida comunal, la inserción de ésta dentro de las exigencias de la sociedad y economía "nacional, la organización de espacios económico-sociales en los cuales la utilización de mecanismos de solidaridad tradicional aparece como alternativa de supervivencia a las presiones mercantiles en la región, configura un cuadro en donde la comunidad y lo tradicional apuntan a mostrar su eficiencia y persistencia, incluso dentro del contexto global de modernización de la sociedad.

Los aspectos que en el presente trabajo relacionado a Carhuamayo hemos querido resaltar buscan precisamente mostrar cómo en el marco de una comunidad inicialmente ganadera en la puna alta de la sierra central se presentan formas de organización económica y social que no eliminan la vida comunal sino la reformulan, que patentizan un peculiar dinamismo de esta organización campesina para incorporar formas mercantiles y capitalistas. .Y, lógicamente, paralelamente a que se desarrollan de sectores campesinos actores de una creciente acumulación comercial y monetaria, se crea un marco diferente en donde se reproducen también los elementos de pobreza campesina. Sin embargo, si partimos del hecho básico de las fuertes limitaciones que la ecología de la puna impone y del marco global de la dinámica de la explotación minera y la circulación mercantil, la nota más resaltante que queremos destacar es la capacidad de los carhuamayinos para supervivir no negando, sino reorganizando y seleccionando, las formas más útiles para una incorporación eficiente en la dinámica nacional.

Creemos que estacar estos aspectos es importante en la discusión y producción actual en antropología andina. Sobre todo porque los estudios antropológicos y sociológicos sobre comunidades campesinas se han desenvuelto en un análisis que sólo ha iniciado la elaboración teórica para comprender la dinámica de la organización económica, social y cultural andina.

La realización, entre octubre de 1984 y febrero de 1985, de un trabajo de investigación antropológica en la Comunidad de Carhuamayo de la Meseta de Bombón, con la valiosa dirección y colaboración de César Fonseca Martel, en el marco del Convenio suscrito por la UNMSM con ELECTROPERU nos permitió en el curso del trabajo de campo y del análisis posterior conocer algunas manifestaciones particulares de la organización social y económica en el contexto de puna alta.1

 

LA COMUNIDAD DE CARHUAMAYO: LA SINGULARIDAD

La comunidad y distrito de Carhuamayo están ubicados en la zona de la meseta de Bombón en las riberas del lago Chinchaycocha, pertenecen políticamente a la provincia de Junín del departamento del mismo nombre; pero por encontrarse hacia el extremo norte del límite con Cerro de Pasco, sus relaciones con ese departamento y las aspiraciones de los pobladores por integrarse a él o diferenciarse de Junín son más acentuadas.

El distrito de Carhuamayo está en la zona ecológica de punta alta con territorios por encima de los 4,100 m.s.n.m., debiéndose distinguir nítidamente dos zonas de ocupación alternativa: la zona inmediata a la ribera del lago u "oconal", zona inundable o dentro del entorno del lago Chinchaycocha, que corresponde propiamente a la meseta de Bombón, y la parte de laderas pertenecen a la cadena oriental de los Andes centrales.

La comunidad de Carhuamayo limita al Oeste y Noroeste con la comunidad de Ninanaca, al Este con las comunidades de Paucartambo y Ulcumayo, al Sur con la comunidad de Huayre y al oeste y Suroeste con la laguna de Chinchaycocha. En su totalidad el distrito solamente incluye territorios pertenecientes al nivel de puna alta, pero hacia el Este su continuidad natural es la zona de quechua agrícola perteneciente ya a las comunidades de Paucartambo y Ulcumayo.

Políticamente el distrito comprende los siguientes anexos: Capillas. Shalipayco, Cután, Chuiroq, Conocc, Tambocancha, Matacancha y Quilcacancha. Estos anexos son asentamiento poblaciones que agrupan a familias fundamentalmente pastoras emparentadas entre sí y que se han ido nucleando de esa forma como consecuencia de la necesidad de la presencia permanente propia del trabajo ganadero.

A diferencia de otras, Carhuamayo de halla situada en un punto singular de ubicación que le permite además de ser paso obligatorio de transporte vial carretero y ferrocarrilero, de la Oroya a Cerro de Pasco, ser punto de inicio de la penetración hacia las quebradas de la vertiente oriental de los Andes además de entrada a la ceja de selva y selva por Paucartambo.

La extensión del distrito es de 29,633 Has. Fundamentalmente de pastos naturales, la población total a 1981 era de 6,479 habitantes, de los cuales 704 son comuneros jefes de familia. Existe una buena cantidad de población al margen de la comunidad.

La comunidad de Carhuamayo manifiesta características específicas que la hacen relevante. Estas son:

a. La comunidad es resaltaste por el desarrollo característico y abultado de transporte y el comercio, pero a su vez por el mantenimiento del control y la explotación de pastos.

b. La acumulación monetaria comercial es abundante frente a otros contextos de pobreza. Existen en Carhuamayo un total de 316 establecimientos comerciales y las informaciones arrojan que debe haber en propiedad de carhuamayinos, de 300 a 400 camiones.

c. la vigencia de un sistema particular de mantención de la familia extensa, las sucesiones o testamentarías, funcionando localizada o no localizadamente y no sólo para la administración de pastos y ganado.

d. La combinación del pastoreo con la agricultura de puna (intracomunal) y de quebrada (extracomunal) en vías de asegurar, a pesar de las condiciones ecológicas, la reproducción biológica del grupo familiar.

e. La posible presencia de mecanismos demográficos (administración de la población infantil, migración, etc.), culturales (esfuerzos de desarrollo de la educación en la comunidad) y matrimoniales que aseguran la permanencia de mano de obra funcional a la explotación de la puna, combinada con la migración temporal vinculada al transporte.

f. La situación de ser una comunidad que se ha desarrollado en un contexto particularmente limitado como es el ecotipo puna planteando el problema de considerar las formas comunales y familiares de organización y la dedicación al transporte como mecanismo tecnológicos y sociales de adaptación a dicho ambiente.

g. El hecho de haberse constituido, teniendo como poblado- eje- a Carhuamayo, una microrregión que articula comercial y productivamente a la zona de puna y de quebrada oriental (Paucartambo y Ulcumayo) y que, en términos de su dinamismo económico, constituye una zona alternativa más importante que la existente al pueblo de Junín (capital provincial).

h. El hecho de existir combinados distintos contextos en Carhuamayo de vigencia o también de Desintegración de la organización comunal: la pérdida de importancia y dinamismo de la comunidad a nivel de pueblo que existe formalmente, la vigencia de la vida comunal a nivel de anexos, la existencia de las sucesiones testamentarias. Todo ello agregado al hecho de aparecer la dinámica municipal como eje alternativo de vida comunal a nivel de pueblo.

Croquis de la Comunidad de Carhuamayo

LA HISTORIA: LOS RASGOS PRINCIPALES DE CONTINUIDAD Y CAMBIO

La ocupación del territorio actual de Carhuamayo, como el de toda la Meseta de Bombón, es de antigua data y se remonta con seguridad a las etnias propia de las zonas en tiempos pre-incas. Las referencias de cronistas permiten suponer que la Meseta de Bombón de obligado transito hacia el norte y hacia el nororiente (Huánuco) fuera convertida por la conquista inca en asentamiento dedicado al abastecimiento y la tributación, así como punto de enlace en las expediciones de conquista. La zona de Bombón originalmente poblada por pueblos fundamentalmente ganaderos pero que combinaban su actividad con la agricultura de maca y papas, con la conquista inca debe haberse convertido en un centro administrativo militar, centralizador de tributos en el proyecto expansivo incaico.

La importancia de la zona como de transito hacia el norte (Quito) es evidente, si se toma en cuenta que el trazo del camino incaico recorre la Meseta y habría pasado por el territorio que hoy ocupa la capital del distrito y que por encima del río Carhuamayo existió un puente de antigüedad colonial, probablemente edificado sobre el puente inca.

La ocupación temprana por el colonizador español (1626) se da en primera instancia como continuidad de las mismas funciones administrativas y de tributación provenientes de la etapa inca pero ahora en un contexto colonial; como también en función del desarrollo de la actividad minera en la región, de la explotación ganadera de ovinos (ligada aquella como abastecedora de carne y tejidos) y, por último, de las funciones del transporte, arrieraje y comercio.

Queremos señalar únicamente tres anotaciones principales que se derivan de los periodos prehispánico y colonial:

a. Carhuamayo y la Meseta de Bombón fueron en épocas precoloniales centros de ocupación que combinaron de manera extensiva al pastoreo de auquénidos y el cultivo mixto de papa, maca y otras raíces autóctonas. La ocupación hispánica ocasionó el cambio de la ganadería hacia la explotación de ovinos extinguiéndose gradualmente la cría del ganado autóctono, así como la disminución en importancia, ante la preeminencia de la ganadería, de la actividad agrícola tradicional. Lo cual explica en zonas enteras que en tiempos prehispánicos fueron cultivadas, en los periodos posteriores, como consecuencia del hecho colonial, han sido abandonadas para esos fines.

b. Existe una continuidad como lugar de transito, de intercambio administrativo, militar, tributario o económico en los pueblos de la Meseta de Bombón y particularmente en Carhuamayo derivado de su posición de entrada hacia la quebrada de las vertientes oriental de los Andes. La fusión del transporte y la comercial, han tenido, por otro lado, fuente de impulso de primer orden en las actividades mineras de la zona.

c. Tanto en la época inca como en la colonial, la zona de Bombón y particularmente el pueblo de Carhuamayo, por las zonas anotadas más arriba, fueron cede de la centralización de la actividad administrativa lo que indudablemente posibilitó la concentración urbana y su desarrollo en esa localidad.

Indudablemente la actividad económica de mayor dinamismo en la zona es la actividad minera y está se concentra en Cerro de Pasco. Como es sabido el desarrollo extractivo de la actividad minera se complemente con la permanente depresión económica de la periferia ligada a ella, en este caso las poblaciones campesinas de actividad ganadera tradicional y pobre. Estas se mueven lo más frecuente dentro de los mecanismos de la auto-subsistencia y la economía natural, partícipes del impedimento de la periferie para el crecimiento y la acumulación. En este contexto, sin embargo, Carhuamayo por rasgos históricos anotados y por su ubicación geográficas , habría tenido desde antiguo la posibilidad de participar de manera singular en este esquema con la actividad comercial y de transporte.

En este trabajo sólo quisiéramos anotar algunos procesos indicativos de la evolución en las últimas décadas del siglo. XX.

 

I. Arrieraje a intercambio comercial

Carhuamayo durante todo el siglo XX, anterior al desarrollo carretero, y sobre todo previo al crecimiento de las vías de acceso a los pequeños pueblos campesinos, es una comunidad de pastoreo que, aprovechando los periodos libres y la mano de obra desocupada que deja esa actividad, se dedica al arrieraje y el trueque ha cumplido históricamente las siguientes tres funciones en Carhuamayo:

1. Complementación económica entre la producción de las zonas de puna con las de la quebrada. De esa manera se ofrecía como actividad alternativa al crecimiento en importancia de la actividad agrícola en la meseta, desempeñando las funciones propias de la búsqueda de la autosubsistencia agrícola-ganadera.

2. Acumulación comercial en tanto los Carhuamayinos desarrollaron lo que se ha denominado "el trueque como forma de acaparamiento de productos agropecuarios"2. Básicamente los grupos mestizos "galas"3 y portando menores montos de mercancía la población campesina, desarrollaron hasta la década de los 50 viajes de intercambio proveyendo de mercancías manufacturadas a los diversos pueblos campesinos de punas quebradas, y obteniendo a cambio de ello principalmente ganado y sobre todo lana que posteriormente era comercializada en los mercados de Cerro de Pasco y Junín. El circuito de intercambio partía de un monto de dinero invertido en las compras de las mercancías manufacturadas, obtenido muchas veces en base a prestamos procedentes de la minería, pero en su circulación incorporaba etapas en donde el intercambio se hacía en base al trueque para culminar en una nueva fase monetaria en los mercados provinciales: (D-M1)-(M1-M2)-(M2-D').

A nuestro juicio las posibilidades que ha ofrecido esta actividad así como la comercialización de la ganadería son los ingredientes principales que explican la acumulación comercial y el florecimiento de la actividad transportista contemporánea en Carhuamayo.

3. Un tercer efecto del intercambio comercial realizado por los carhuamayinos es la aculturación con respecto a la sociedad "nacional" y el conocimiento de la realidad inter-regional. Los comerciantes carhuamayinos tuvieron en la actividad comercial desarrollada tradicionalmente, una fuente de cambio cultural semejante a la que en otras comunidades produce con mayor fuerza la migración laboral o las actividades educativas. El conocimiento y destreza en el manejo de los mecanismos comerciales y financieros (la apreciación sobre el riesgo, el ahorro y la especulación) experimentados en el curso de las actividades propias del transporte desde las fases más tradicionales del arrieraje, han influido en las formas de la organización económica de la familia campesina contemporánea en esta localidad.

CIRCUITOS DE COMERCIALIZACION DE CARHUAMAYO

A. De Lima-Carhuamayo-Cerro de Pasco-Pucallpa-Tingo María:

------> harina, azúcar, cemento, combustible, mercaderías.

<------ maderas, ftua, aceite de palma, yute, maíz. A partir de Carhuamayo se incorpora la papa procedente de Paucartambo y Ulcumayo.

B. De Carhuamayo-Cerro de Pasco <==========> mano de obra -----------> carne

C. De Carhuamayo-Oroya <==========> mano de obra ; -----------> carne

D. De Carhuamayo-Junín: lana (De ahi a Huancayo).

E. De Carhuamayo-Paucartambo-Ulcumayo:

-----------> abono, champa, carne, chuño.

<----------- papa, maíz, etc.

 

II. Privatización y reacomodo comunal

Las tierras de Carhuamayo en su mayor parte son conducidas privadamente; ello no es sino la culminación de la tendencia de la privatización iniciada a principios de siglo. Esto ha ido paralelo a la perdida de importancia de la comunidad como controladora del trabajo agropecuario y de la distribución de las parcelas o estancias. Tal funcion ha pasado durante el siglo XX a las testamentarías o a las personas individuales.

Sin embargo, y como lo desarrollaremos más extensamente, ello no ha significado la desaparición total de la función comunal. Se puede reconocer dos planos: La comunidad campesina a nivel del pueblo que ha perdido toda función de control de tierras, a excepción de la mínima porción que constituye la pre-cooperativa Mancan; y, a un nivel menos amplio, las agrupaciones de parientes en los distintos anexos que mantienen sus vínculos como comunidad y de diferentes formas ejercen funciones en el control de tierras. Por último, las testamentarías o agrupaciones herederas de un antepasado relativamente cercano son también esferas de ejercicio de lo comunal en las actividades productivas.

Es por ello que el resultado de la evolución de la propiedad en el presente siglo tiene que consignar un fenómeno ambivalente: el decaimiento de la comunidad a nivel de pueblo, por un lado; pero el reordenamiento de la comunidad y sus funciones a nivel de familias, grupos de familias y anexos.

En resumen, del proceso histórico de la comunidad de Carhuamayo se pueden extraer un conjunto de factores (disposición geográfica y vial, combinación de actividades productivas y de intercambio) que favorecieron una peculiar forma de intervenir económicamente en la zona prestando una imagen de comuneros transportistas y con ello mejores condiciones de acumulación comercial. En segundo lugar, un desarrollo prioritáriamente parcelario más que comunal coherente con la dinámica de aquellas actividades. Y, por último, una eficiencia cultural (se asumen los valores propios de la sociedad urbana y capitalista, combinándolos con los tradicionales) y sobre todo económico-social (las ventajas del comercio y del transporte) que llego a colocar a la población campesina en mejores condiciones de adaptación productiva y social a la zona, incluso respecto a la población misti o "gala".

Históricamente también es necesario discernir condiciones más favorables para el crecimiento urbano, sobre todo en función del desarrollo vial que sin embargo en pugna con las estructuras políticas provinciales, departamentales y regionales desembocan en una constante preocupación, sino frustración, de sus pobladores impedidos de desarrollarse mas allá de las características de distrito dependiente de Junín.

 

LA COMPLEMENTACION MODERNIDAD - TRADICIONALIDAD

Los aspectos inmediatos de la realidad en esa región nos presentan un cuadro en donde el avance del desarrollo mercantil, el crecimiento "urbano" poblacional, las ocupaciones ligadas al transporte como prioritarias y las expectativas culturales, particularmente de los sectores juveniles por la integración a la sociedad "nacional", configuran una imagen en donde parecieran no presentarse con fuerza los rasgos típicos de la comunidad tradicional.

Sin embargo, en un análisis más profundo lo que se nota es más bien una diferenciación de espacios económicos en donde parte de los miembros de la comunidad participan definitivamente en actividades productivas para el autoconsumo (agricultura de maca y shiri, pastoreo ovino y artesanía textil) que en realidad en conjunto posibilitan que parte de ellos mismos u otros miembros del grupo - particularmente los estratos juveniles- se incorporen a las actividades comerciales y del transporte. Constatas que la mayoría de estos últimos participa en tales ocupaciones por período y hasta los 35 y 40 años, retornando posteriormente a las actividades tradicionales, remite también a proporcionar una imagen de complementación mas que de oposición entre autosubsistencia y mercado.

En el lugar de una idea lineal de ruptura de las actividades y relaciones tradicionales ocasionada por el mercado y las labores "modernas", lo que puede más bien esbozarse es una suerte de coexistencia de ambos espacios donde la dinámica de la composición familiar y de los niveles de organización comunal regulan la forma y proporciones de aquella coexistencia.

 

LA REFORMULACION DE LA VIDA COMUNAL

A semejanza de lo anterior, tras una apariencia inmediata de ruptura y desintegración comunal y de reemplazo de esta por lo municipal y distrital, puede notarse en Carhuamayo una suerte de reformulación en planos más pequeños -o distintos a nivel de todo el pueblo- de la vida comunal. Si bien la comunidad campesina se encuentra en crisis puesto que sus actividades características clásicas (faenas, asambleas, tierras comunales) están reducidas al mínimo o no funcionan, la vida comunal se recrea en el plano de anexos y al interior de ellos en cada uno de los grupos familiares, entendidos estos no como propiamente nucleares sino como agrupaciones extendidas. El trabajo comunal, el reconocimiento de usufructo colectivo de pastos, las formas de reciprocidad en la obtención de mano de obre siguen funcionando en la esfera de los anexos y testamentarías (familias extensas).

Configúrase pues, una situación en donde tras de una aparente ruptura comunal, está en toso caso deviene limitada y más bien la relación colectiva se reproduce en otras esferas. Nuestra idea consiste además en pensar que esta reaparición de lo comunal es el sustento productivo de la autosubsistencia, que a su vez posibilita el margen de dedicación a lo mercantil y al transporte en esta localidad.

 

LA COMUNIDAD COMO UNIDAD DE DIFERENCIACION SOCIAL

Indudablemente, al interior de Carhuamayo existe una estratificación socio-económica que tiene como grupos dominantes a los que acceden al comercio lanero, a los productos urbanos y al transporte regional de carga y pasajeros. A contraparte la mayoría pastora y agrícola de subsistencia, muchos de ellos sin tenencia propia, son los grupos más pobres. No obstante, la complementación agricultura-ganadería de autosubsistencia con comercio-transporte sugiere una imagen de mutua dependencia de ambos sectores y sobre todo de utilización en las esferas en donde funciona lo comunal de esas relaciones para reproducir los vínculos de explotación.

La diferenciación social existente en Carhuamayo producida por el comercio y el transporte en los últimos años, como antes lo que fue por la desigual posesión de tierras y ganado, no ocasiona necesariamente una transición hacia la desintegración comunal. Sino que más bien la reproducción de la estratificación está asegurada por la existencia de lazos comunales, ya sea en el plano de toda población o a nivel de anexos o testamentarías.

La comunidad o lo comunal, aparece así como un conjunto de relaciones sociales que al permitir la ocupación diferenciada y complementaria en actividades "tradicionales" y "modernas", asegura también la diferenciación social. Lo comunal es así vehículo de diferenciación social.

 

LA ADAPTACION SOCIAL Y ECONOMICA A LA PUNA

Las cuestiones anteriores pueden ejemplificarse en diversas formas de organización social, económica y tecnológica que configuran sendos mecanismos de reproducción social de adaptación comunal, en el contexto de puna. Nuestra intención es tratar de caracterizar cada una de ellas.

 

I. División territorial y tenencia diversificada

En Carhuamayo las zonas de ocupación, y tomando en cuenta la utilización que de ellas se hace, son:

a) La zona inundable del lago.

b) La zona en torno al lago pero no inundable , que se prolonga hasta lo que

podrá corresponder a la parte baja del pueblo.

c) Las zonas de pastoreo y cultivo de secano en torno al pueblo, que podría

corresponder a la parte alta del pueblo.

d) La zona urbanizada de pueblo que incluye potreros y pequeños corrales de

siembra de hortalizas, patios de secado de shiri o chuño, etc.

e) La alta puna.

Todas ellas en lo fundamental dependen del régimen de lluvias.

De manera más específica y desde el punto de vista de la distinción de los productores de la zona, existen dos grandes zonas diferenciadas de pastos:

La zona del lago y la de pastos de altura. Ambas son de necesidad a lo largo del año, puesto que su uso se reparte de acuerdo a la estación de lluvias. De junio a noviembre se ocupan las tierras del oconal. Y desde diciembre hasta mayo son los pastos de altura la única fuente de alimentación para el ganado. Ante el sobrepastoreo que existe en algunas zonas, o en general ante la escasez de pastos, la población de Carhuamayo acostumbra alquilar (minga) pastos de la comunidad vecina de Ninacaca.

Frente a la realidad de estas dos zonas diferenciadas y de cultivo alternativo, no simultáneo salvo que se crearan condiciones de irrigación artificial durante la estación seca, la preocupación de los pobladores de Carhuamayo se centra en tener los mecanismos sociales y económicos (de propiedad o usufructo individual, familiar o colectivo) que les permitan acceder anualmente a esos sectores.

De ambos sectores, el oconal, a pesar que proporcionalmente es más reducido que el resto del territorio de la comunidad (aproximadamente un tercio del conjunto de la extensión global de Carhuamayo) por la calidad de sus pastos, consecuencia de las anuales inundaciones del lago, constituye el sector más importante y deseado por los propietarios del ganado. Ello ha desembocado en que se mantenga y fortalezca la función de las testamentarías y sobre todo, el papel de comunidad que desempeñan los anexos. En general a excepción de la zona central inmediatamente contigua al pueblo, que se ha privatizado, el resto de la zona que bordea al Lago está vinculada a formas asociativas para el acceso a la tierra.

CUADRO Nº 1

TENENCIA DE TIERRA SEGUN TIPO DE PASTOS

 

 Del cuadro anterior se puede deducir que no todos los comuneros tienen propiedad sobre pastos en el oconal. En el mejor de los casos sólo el 39% de los propietarios mantienen propiedad sobre estas tierras, lo que implica que el resto debe buscar otras formas para asegurar el usufructo de ellas. Estas son: la sucesión, el parentesco y el matrimonio, el trabajo como pastor o huacchillero, y el alquiler o minga. Igualmente los cambios en la zona del oconal no solamente afectan a los propietarios sino a los usufructuarios y en alguna forma al conjunto de la comunidad (la zona es fuente de extracción de champa y bosta).

Confrontando el universo propiamente de la comunidad se obtienen resultados relacionados.

CUADRO Nº 2

COMUNEROS CON TIERRAS SEGUN NUMERO DE PARCELAS Y TIPO DE PROPIEDAD

  

 

 

 

Es significativo que más del 40% de los comuneros solo posean una parcela. Ello es base para que se realicen esfuerzos para usufructuar otra parcela, toda vez que el calendario exige transladarse en determinadas épocas del año.

Es claro que parte de los comuneros poseen hasta dos parcelas, lo que haría suponer que en general buscan que ellas estén ubicadas en zonas diferentes de acuerdo a las dos estaciones fundamentales en el calendario ganadero (oconal y altura).

La abrumadora mayoría de las parcelas son calificadas como de proindiviso, es decir en sucesión hereditaria (84.2%) Y es resaltante que entre los Carhuamayinos la propiedad agraria reconocida como privada se presente en bastante baja proporción (5.1%).

Por el ángulo de la propiedad encontramos, pues, la importancia de la familia y en su manifestación de extendida. Así como los límites, hasta el nivel de este tipo de familia, del proceso de privatización de las tierras comunales.

A través de la tenencia se puede explicar por eso la necesidad de los vínculos comunales y de reciprocidad vía el funcionamiento de los anexos y las familias extendidas de las testamentarías.

 

II. Complementación Agricultura - Pastoreo - Comercio - transporte

La supervivencia social y económica en el habitat de puna alta no siempre ha tenido que significar la exclusiva especialización pastoril. Variadas son las fuentes que atestiguan que en tiempos prehispánicos la zona de Chinchaycocha contó con extensas zonas agrícolas dedicadas al cultivo de la papa, maca y Shiri. Ha sido el hecho colonial el que ocasionó el abandono progresivo de los cultivos, la carestía de mano de obra y la especialización ganadera desplazando a las alpacas por ovinos.

Sin embargo, ello no significó para la zona la desaparición total de lo agrícola, sino que hoy en día cada anexo y cada familia extensa asegura zonas de uso colectivo para el cultivo de productos. Y las necesidades de abastecimiento alimenticio de ninguna forma son satisfechas sólo en base de la ganadería sino con el contacto permanente -relaciones matrimoniales, de trabajo y mercado- con las zonas de quebrada.

El abastecimiento de productos destinados a conseguir mano de obra en base a la solidificación de relaciones recíprocas y lazos de parentesco real (restringido o ampliado) o ficticio, se asegura en gran medida la producción agrícola de maca. Este producto a pesar de las dificultades y tiempo de trabajo que implica su cultivo y preparación, constituye en Carhuamayo uno de los principales con destino básicamente ceremonial en la reproducción de las relaciones económicas de los carhuamayinos.

La agricultura de subsistencia, pues, puede circunscribirse a dos esferas:

a) interna: parcelas para cultivo de maca y shiri (subsistencia alimenticia y aprovisionamiento de fondo ceremonial).

b) externa: parcelas o productores en las quebradas orientales de Paucartambo y Ulcumayo (con fines fundamentalmente alimenticios).

La ganadería de ovinos constituye el principal producto de autoconsumo. Si bien se pueden establecer diferenciaciones en la tendencia4 en general todos los miembros de la comunidad buscan, precisamente por medio del vínculo familiar, tener acceso a la producción ganadera.

Planteamos que la explotación del ganado en térmicos de autosubsisitencia y la utilización de una parte de este para la comercialización de carne y lana suministran bases para permitir la existencia de un sector poblacional dedicado a actividades no agropecuarias: comercio y particularmente transporte.

En otros términos, si bien las actividades ligadas a la circulación mercantil y al servicio del transporte proporcionan márgenes de acumulación a un porcentaje importante de la población carhuamayina (44% de la población son trabajadores transportistas y 38% de los comuneros son choferes y comerciantes), este último se sustenta en los recursos de mantención proporcionados por el sector dedicado a la agricultura-ganadería de autosubsisitencia.

Las actividades de autosubsistencia suministran los requerimientos previos para el desarrollo del transporte: la atención de las necesidades alimenticias del grupo familiar que permanece en la comunidad (mujeres, niños ancianos). Igualmente estas actividades proporcionan parte de los recursos alimenticios de la población emigrante, mediante envíos periódicos. O también los recursos para mantener a los jóvenes migrantes en actividades fuera de la localidad en búsqueda de status.

El sustento que suministran las actividades agropecuarias consiste en que estas actividades (pastoreo extensivo y agricultura marginal) proporcionan el tiempo libre en el calendario anual y las disponibilidades de mano de obra (liberación del trabajo masculino) para la realización de otras actividades. O también porque en lo agropecuario se encuentran un capital potencial; que en el campesino busca convertir eventualmente en recursos para invertir en las actividades modernas (adquisición de vehículos o de mercancías).

CUADRO Nº 3

POBLACION ECONOMICAMENTE ACTIVA DE 6 AÑOS A MAS.

CARHUAMAYO, 1981

 

 

 

 

CUADRO Nº 4

OCUPACIONES. COMUNIDAD CARHUAMAYO 1984 

 

III. La organización Comunal a Nivel de Familia Extensa

Si bien la familia nuclear es la unidad domestica esencial, caracteriza a Carhuamayo el desarrollo de vínculos interfamiliares hasta llegar a una red de miembros perfectamente reconocidos que en muchos casos se ubican en residencias próximas entre sí, estrechándose de esa manera los vínculos de ayuda mutua. En base a las sucesiones o testamentarías se organiza una red de parientes, todos ellos herederos de un antepasado común que funcionan integrados para diversas actividades productivas: faenas, acuerdos de asambleas o acciones de servicio urbano, presentando la imagen de una familia extensa. Cada sucesión o testamentaría es conducida por un familiar escogido dentro de los herederos mayores y que ejerce funciones de autoridad que en muchos casos se entiende directamente con la comunidad o el municipio.

Estas sucesiones cumplen diversas funciones5

a) son unidades de mantenimiento económico, organizadas con un sistema de autoridades renovables cada año;

b) son unidades al servicio del pastoreo en tanto están encargadas de administrar los trabajos ganaderos susceptibles de ser hechos de manera colectiva (baño, cura, etc.). En los casos en que las tierras que poseen sean susceptibles de uso agrícola de secano, son unidades de distribución anual de tierras para usufructo de cada familia nuclear o heredera. En todo caso, se trata de la unidad de decisión para la utilización anual de las tierras.

c) son unidades que asumen en enfrentamiento colectivo a otras actividades no agrícolas que se consideran beneficiosas para el conjunto de parientes (p.e. el desarrollo de la escuela).

d) son unidades de organización del trabajo. La testamentaría puede organizar el trabajo colectivo o asumir la contratación del trabajo de personas para actividades de usos colectivo.

Además de estas características que son comunes, en el caso de la "Mariano Nieves Cháves", se presenta un fenómeno de particular importancia: la adaptación del sistema de funcionamiento colectivo y familiar para el tratamiento de la lotización de la urbanización del llamado pueblo nuevo de Quilcacancha. Sistema de urbanización periférica al pueblo que ha sido organizado exclusivamente en base a la construcción y aplicación de una extensa red de parentesco por consanguinidad o afinidad utilizado como requisito para la ocupación de un determinado lote y su ubicación de acuerdo a las necesidades del grupo.

Si convenimos que las testamentarías son mecanismos de ampliación familiar ( que incluyen varias generaciones) organizados para la conservación de la propiedad sobre la tierra, comprenderemos también que las reglas matrimoniales tienden a la endogamia dentro del pueblo y en muchos casos dentro de la familia extendida. A través de la genealogía de la testamentaría que nos ha venido sirviendo de referencia hemos ubicado una buena frecuencia de matrimonios entre primos que indudablemente tienen como objetivo la conservación o el acceso al matrimonio territorial. En esa misma línea es que se encuentran explicaciones los permanentes, numerosos y largos litigios de tierras entre sucesiones y que en muchos de los casos son la base para la asociación entre familiares.

Es posible pensar hipotéticamente que a partir de los últimos años, por la expansión demográfica, el funcionamiento extenso de la familia se ha reforzado como claro mecanismo de defensa de las tierras cada vez menos suficientes para pastoreo y agricultura. A esto mismo obedece el incremento reciente de las pugnas legales de tierras.

A objetivos relacionados obedece la distinción en términos de apelativos que los carhuamayinos dan a los integrantes de la familia Chávez, y que nos es exclusiva de esta. Los comuneros distinguen por lo menos tres troncos: "Atoq" Chávez, "Piqpi" Chávez y "Mucho" Chávez que si bien son narrados como ocurrencias "graciosas" y "costumbres curiosas" de la localidad, deben funcionar o han funcionado como mecanismos de identidad grupal. Más aún, cuando estos tienden a ser ubicados en diferentes espacios territoriales de la comunidad.

Puede plantearse la hipótesis que correlaciona con los sectores más pobres y de los anexos la vigencia de lo que hemos llamado familia externa, mientras que en el centro del pueblo y para las familias más pudientes el tipo de familia nuclear es el más frecuente. La familia extensa es más funcional para aquellos sectores que se vinculan con mayor dedicación a las actividades agropecuarias. Sin embargo, el sistema comporta en mecanismo de organización social que permite que en torno a un mismo territorio de uso agrícola o ganadero no tenga que estar necesariamente presente el conjunto de los propietarios , sino que pueda existir una división del trabajo entre los diversos parientes que consisten en que mientras algunos de ellos permanecen en el campo otros se dedican a las actividades no agropecuarias. Esta división funciona para los sexos y las edades: los mayores permanecen en el campo, mientras la población joven se ocupa en el transporte o ha emigrado (no definitivamente) por razones educativas o laborales.

La organización de los vínculos familiares se presenta como un claro mecanismo de supervivencia en las condiciones productivas de la región y en respuesta a las exigencias económicas (monetarias) provenientes de la expansión del capitalismo en el país.

 

IV. La composición familiar y la Adaptación Ecológica.

CUADRO Nº5

DISTRIBUCION EDAD - SEXO. CARHUAMAYO, 1981

 

Del análisis de la distribución de edades en Carhuamayo se desprende claramente la salida de población que comienza desde las escalas de 15 años y se hace particularmente intensa a partir de los 20. En el 43.9% de la población que permanece en el distrito tiene menos de 14 años, indudablemente en mayor proporción que la población adulta en plena capacidad de trabajo y en edad fértil. Ello redunda en una reducción de la natalidad y fecundidad.

Precisando los fines de la migración es posible pensar que esta es fundamental laboral y en menos grado educativa. La baja Poblacional se empieza a registra a partir de la escala 10-14 años lo cual indica interés educativos hacia la secundaria o educación superior, más no a la primaria o inicial. Por otro lado, la presencia de población infantil es funcional al ecotipo de puna alta, tal como ha sido señalado por Thomas6 :

"...desde los seis hasta los dieciocho años que son los dos tercios del periodo que el

niño vive en su hogar, produce más de lo que consume".

Ello tanto desde el punto de vista de adaptación biológica (consumo de menor cantidad de calorías y en ese sentido adaptación social a la hipoxia), como desde el punto de vista económico, porque la población infantil y adolescente no debe ser entendida solo como "carga familiar" (Chayanov) sino con una función abiertamente productiva. Desde este punto de vista pueden hallar explicaciones los intensos y antiguos esfuerzos por el desarrollo escolar en sus niveles más elementales: la preocupación por neutralizar las tendencias a la migración temprana mediante la creación de oportunidades educativas en el propio ámbito de la comunidad.

A los mismos fines, pero con mayor relevancia concurre la población femenina. El índice de masculinidad decrece desde los 15años hasta los 50, lo que significa que la salida poblacional, si bien es compartida por ambos sexos, es más intensa en el caso de los varones. En una comunidad campesina en donde la actividad característica es el pastoreo, la presencia de la mujer adulta sigue siendo indispensable. Si el transporte es la otra actividad fundamental, será un factor de atracción sobre todo para la población masculina, permitiendo que la unidad familiar pueda organizar una división del trabajo que, en resumen, puede constituir en: a) niños, jóvenes y mujeres dedicadas al pastoreo; b) hombre adultos en buena proporción salen de la comunidad y se dedican al transporte ( lo que no debilita realmente al pastoreo); y c) pueden desarrollarse en el pueblo labores que no implican descuido de la actividad productiva agropecuaria como las comerciales o de servicios que en lo fundamental ocupan mujeres y adultos mayores de 60 años.

Evidentemente se trata de una forma de división del trabajo que realiza una adecuada adaptación a las condiciones ambientales de la puna alta, como también un mecanismo alternativo de resistencia a las condiciones económicas deprimidas que caracterizan la sierra y el medio campesino peruano.

La migración debe ser entendida también como un mecanismo adaptativo. El índice de masculinidad calculado para el departamento de Junín es 101.1 en 1981 y de los departamentos de mayor índice (de mayor flujo migratorio, Apurimac, Ayacucho, Puno, Huancavelica) oscilaron en 90 a más. En cambio el índice de masculinidad en Carhuamayo para todas las edades es de 85.4 lo que queremos utilizar, a falta de pruebas más directas, como un indicador del intenso proceso de movilidad Poblacional.

 

APRECIACIONES FINALES

1. El desarrollo histórico de la comunidad y distrito de carhuamayo ha configurado una realidad económica y social compleja que tiene como elemento principal el auge del transporte pero que mantiene relaciones de complementación con las actividades ganaderas y agrícolas de autosubsistencia que le sirven de base. De manera tal que su interdependencia es el rasgo distintivo.

2. Demográficamente, Carhuamayo ha desarrollado formas de adaptación eficiente al ecotipo puna que en lo fundamental consisten en una adecuada división productiva del trabajo por edad y sexo para las funciones ganaderas y agrícolas. En ese sentido también debe ser entendido el desarrollo comercial y del transporte, así como las migraciones con esos objetivos fuera de los límites de la comunidad.

3. El funcionamiento de las familias extendida en su manifestación de sucesiones o testamentarías, constituye uno de los elementos indispensables para la comprensión de accesos a patos y su mantenimiento y para entender el conjunto de las actividades productivas. La existencia comunal de las familias extensas es una forma particular de supervivencia social y económica en el ambiente ecológico de puna alta, así como un mecanismo que permite el funcionamiento productivo eficiente en el contexto de una cada vez mayor penetración mercantil. Es también, si se toma en cuenta la condición dependiente de la sierra y de la población campesina, un mecanismo de resistencia.

4. Existe, particularmente acentuada en los últimos años, una situación de crisis de la comunidad campesina como entidad de todo el pueblo; sin embargo, la singularidad de Carhuamayo consiste en el reordenamiento de la vida comunal en el plano de las familias extensas, las sucesiones y los anexos. Este doble proceso atestigua la vigencia de las formas comunales para la reproducción de la vida campesina incluso en contextos de intensa participación mercantil por estar ese distrito plenamente integrado las actividades del transporte.

5. Las posibilidades agrícolas en la Meseta de Bombón son muy antiguas. La reproducción de las relaciones de dominación interna ha ocasionado la presión a la comunidad para su dedicación cada vez menos agrícola. No obstante esta actividad sigue manteniendo una importancia cualitativa en tanto asegura, a pesar de los contextos mercantiles, el suministro de la dieta alimenticia básica en la población, así como los requerimiento ceremoniales para la reproducción del sistema económico.

CUADRO Nº 6

DISTRIBUCION DE ESTABLECIMIENTOS COMERCIALES POR CATEGORIAS Y RAMAS DE ACTIVIDAD. CARHUAMAYO

 

6) El desarrollo del comercio y el transporte configura una imagen de "crecimiento económico" característico del distrito, incluso comparados con los niveles alcanzados por Junín; así como

también una imagen diferente a la de pobreza campesina por lo menos para un sector relativamente importante de la comunidad y distrito. Crecimiento que, sin embargo, es eminentemente en la esfera de la circulación y coexistente precisamente con el no crecimiento, atraso y/o tradicionalidad en la esfera productiva.

BIBLIOGRAFIA

ARANCIBIA, Hipólito

Monografía del distrito de Carhuamayo.

Croquis de la comunidad de Carhuamayo.

 

ANTUNEZ DE MAYOLO, Santiago

La nutrición en el antiguo Perú

BROOKE THOMAS, R.

Adaptación humana y ecología de la puna

COMUNIDAD CAMPESINA DE CARHUAMAYO

Padrón de Comuneros

GUSTRED, Glynn

Las punas de los Andes Centrales

CHAYANOV, A.

Las organización de la unidad económica campesina

DIRECCIÓN DE COMUNIDADES CAMPESINAS

Atlas Comunal, 1962

FONSECA MARTEL, César

Sistemas económicos andinos

HUGUET POLO, Andrés

Estudio socio-económico y desarrollo rural en las comunidades

colindantes al Lago Junín.

INSTITUTO NACIONAL DE ESTADISTICA

Censos Nacionales de Población y de Vivienda

INSTITUTO NACIONAL DE ESTADISTICA

Aspectos demográficos del Perú

MUNICIPALIDAD DISTRITAL DE CARHUAMAYO

Declaraciones Juradas de Impuestos a la Renta

VALCARCEL, Luis E.

Historia del Perú Antiguo.

 

NOTAS

 

1 Huguet Polo, Andrés. U.N.M.S.M., 1985.

2 Fonseca, Cesar. 1973,p.129

3 "Galas": equivale a "misti".

4 Las mas altas frecuencias se concentran en los comuneros con menos de 100 ovinos presentándose grupos en distribución más o menos homogénea desde los 10 ovinos hasta los 100. No obstante, hay que resaltar que el 50% de los comuneros tienen menos de 30 ovinos; y sólo un poco más del 11% sobrepasan los 100 ovinos.

5 De las diversas testamentarías existentes en Carhuamayo hay que resaltar la de la familia Mariano Chávez, la que cuenta con un árbol genealógico que comprende a 461 personas en un total de siete generaciones y que como documento escrito y gráfico -probablemente no exclusivo de esta testamentaría- es utilizado para la determinación de derechos y obligaciones de la familia.

6 Brooke Thomas,R. Adaptación humana y ecología de la puna.

 

 

 

 

 

 

 

 


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