perdido para Cristo como el triste Demás.
II- La preparación de estos hombres.
Para llevar a cabo la reconstrucción de este mundo en ruinas hacen falta hombres debidamente escogidos. Pero estos hombres además han de estar debidamente entrenados y preparados para esta importante tarea deben tener:
A- Profunda preparación interior.
1. El nuevo nacimiento ha de seguirle una profunda preparación interior.
2. El nuevo nacimiento que nos aparta del mundo y nos reconcilia con Dios es la
regeneración espiritual, el lavadero del alma.
3. Vivir la vida interior no es encerrarse en un convento o en una ermita. Eso es vivir la
soledad del alma. La vida interior brota inconteniblemente, se transforma en esos
rios de agua viva y riega a otras almas, alcanza otras vidas y purifica otros corazones.
B- Revolución Continua
1. Todo cristiano debe vivir en una continua revolución.
2. La conversión de por si es ya una revolución espiritual que transforma la naturaleza
del hombre y cambia de raiz su forma de vida.
3. Un ej: de continua revolución lo fue el apostol Pablo. Hombres que trasforrnaban el
mundo. En en Efeso " estos hombres siendo judios alborotan nuestra ciudad (Hechos
16:20). En Tesalonica "Estos que trastornan el mundo entero tambien han venido
aca"(Hch.17:6)
C- Teoria y Practica
1. Si se pusiera tanto enpeño en preparar el alma de los predicadores como se pone en
preparar su mente, el mundo seria distinto de como es.
2. Hay muchos escritos para la enseñanza de la teologia y doctrina biblicas pero muy
pocos que enseñen a vivir una autentica vida cristiana.
3. No solo esto es suficiente hay que vivir además la vida cristiana. Yo diria transpirar
el cristianismo por los poros.
D- Espiritu de Lucha
1. Tenemos que tener un espiritu de lucha en todos los aspectos de nuestra vida.
2. Los ministerios que abandonan su tarea, arrojan la toalla, porque no tiene un espiritu
de lucha.
3. Contamos con el poder de Dios como decia Pablo "Todo lo puedo en Cristo que me
fortaleze".
4. Un hombre dijo: "Trabaja. Si no vences hoy, trabaja. Si no vences mañana, trabaja.
Has de vencer tarde o temprano."
III. Conclusión.
Cristo vino a encender fuego y lo encendio durante tres años, un fuego espiritual que cambiaba, trasformaba vidas y las llevaba al arrepentiminto. (Lc. 12:49). Es un fuego que prende el alma del individuo y la purifica, la limpia y la enblanquece para Dios.
Nosotros somos luces en medio de las tinieblas. Tambien nosotros como Cristo estamos llamados para encender en la tierra el fuego de Dios. Por eso somos HOMBRES ELEGIDOS.