CANCIÓN
Hay sombras escondidas
entre nubes maliciosas
de algodón y amores
viejos
Una voz se escucha
esa mano huye
Los ojos no alcanzan la
distancia
Los poemas envejecen
en un cajón perdido
entre brumas asesinas
de la calle salpicada
por mis manos de poeta
(suicida temporera
con escarcha en las ideas)
Una voz se escucha
esa mano huye
Los ojos no alcanzan la
distancia
Lentamente mueren
las flores que sembramos
con las dudas de la duda
He robado truenos
por ver si despertaba
del letargo
mortal que padecía
Las alas que tuve un día
perdieron sus plumas
en el descuido
de volar chocando siempre
con paredes cuerpos
humo
y he regresado herida
con acritud y miedo
escaldada de rebote
con la ira
sin control chocando en
el
espejo
HUELLA
GIGANTESCA DE UN SILENCIO PROLONGADO
Un largo manantial de palabras
abrasa la mejilla
Ese verso inacabado partiendo
el corazón
Ante el caos que se avecina
imagino las ideas
de una mano en el espejo
rebuscando entre la sombra
el porqué de los
silencios
Al principio quise marcharme
Perderme entre sílabas
y acentos
Disolverme en el verso
que no siento
Escribir un largo poema
complicado y misterioso
Leerlo todos los días
y quedarme como estaba
Tan sólo un poco
después
paseaba por las calles
hablando con mi sombra
en los portales
Mirar la noche y no ver
nada
dilatando las pupilas
al revés
a la espera interminable
del olvido
El tiempo pasa como puede
yo me aparto por si acaso
Perderme en el vacío
farragoso
que recubre las ideas
y tapona
arrebatos adheridos como
grapas
al temor de hablar en
otro idioma
El idioma de los loros
los perdidos
los cobardes que se llevan
las medallas
El idioma de los necios
los vencidos
Vosotros
los imbéciles
de siempre
descarnados por la envidia
enmascarada
Los traidores a la lucha
y la palabra
Yo me río del cristal
que os separa
de la flor que luzco en
mi solapa
de sus hojas
de su aroma
su misterio
Sois la octava parte de
la nada
los pegotes que me encuentro
en las aceras
que se pegan a mis suelas
y se clavan
He llorado por los que
caen
hacia arriba como borrachos
Sabuesos que esconden
sus pupilas
tras la yema del dedo
pulgar
Eruditos levantándose
iracundos
ante el simple poema que
dedico
al dolor santificado
por la verdad sin etiqueta
He llorado y reído
ahogada - estrepitosamente
Bellísimas palabras
enlazadas
dibujando versos al cuadrado
Mensajes en la tangente
Sentimientos por definición
como la clave de un código
de barras
Huellas negras en la playa
de los náufragos
vencidos
No se curan las heridas
del amor en la ventana
Suenan voces agresivas
en el alma de los tristes
La canción desesperada
del poeta abandonado
a sus miserias
sus conjuros
las palabras
INSOMNIO
Amigos de la noche inoportuna
obligados amantes del
silencio
la esperanza escapa con
los dioses
presos del temor sin nombre
Palabras anidan en mi
cama
vacía por la espera
interminable
del amor bajando en tu
parada
Luz- latido de horizonte
aplastado por el golpe
de la espalda
que me obliga la postura
vertical
Se disparan las ideas
y puñales
de un poema como yo inacabado
Amigos de la noche inoportuna
invitados a esta mesa
sin pintar
Este llanto peregrino
que me vence
mancha todo de forma desigual
Fría estancia ofrezco
a los ausentes
Manos muertas caminando
hacia la luna
Cuerpo quieto en la tumba
que hay detrás
de la risa que dibujo
torpemente
cuando pienso las bobadas
que ahora escribo
remendando la tristeza
del doliente
corazón cansado
que cobijo
...voy tocando puertas
blindadas por el odio...
templos de soledad dibujan
estancias desocupadas
no quedan restos de sudor
ni olor de carne como
de gente
sólo lágrimas
insípidas
labios abrochados
corazones en el exilio...
14 versos
y una frase
He vuelto de rincones
grises
donde el abrazo se perdía
en las manos nostálgicas
de los que como yo nunca
aprenden
Te he recordado
como siempre lo hago
con la angustia de un
día y otro día
respirando miedo sin tu
presencia
Te lloré
como siempre lo hago
con el dolor adormecido
que rasga mis recuerdos
Incluso te he querido
como siempre
con la plúmbea
frustración
de no haberte conocido
Caminaré de nuevo
sobre las flores marchitas que llovieron en mi ausencia
15 versos
y una frase
Llegarán días
invisibles
cuando el miedo duerma
en las esquinas
Entonces será tarde
para luchar contra
lanzas disfrazadas
de sonrisas deshechas
como el pan
Unos pocos alzarán
el brazo como puedan
-lágrimas salpican
las aceras
ojos ciegos por palabras
incrustadas-
señalando un cielo
agonizante
la esperanza prendida
entre alfileres
El resto (la temible mayoría)
dejará de respirar
muy lentamente
El terrible impacto de
un suspiro
les dejó noqueados
y en silencio
Un enorme epitafio se
dibuja
"Aquí yacemos todos
los que por no ser no somos el recuerdo
de nada ni de nadie"
Cuadros
de Montserrat