Digitallity
terribilis est locus ist

 

Adicto a la Información

 

Un hombre llega a su entrada, su mente corriendo del café que acaba de consumir. El tiene ideas sobre su estilo de vida. TIene arrepentimientos también, pero más que todo ideas. El decide poner estas ideas en papel, más que todo vocalizarlas - sacarlas de su sistema y a lo abierto. Ellas tienen significado en papel, toman estructura. El puede o no mandar éstas ideas a los vastos rincones de la red, mandados a pelear por si mismos entre los electrones y sentimientos digitales.

Talvez.

Va a la casilla de correo a revisar si llegó algo. Correo basura, como siempre. Nunca recibe nada interesante por el correo normal. Mirando al frente ve a los vecinos moviéndose entre la diminuta luz de su entrada. Siempre han sido curiosos. O sea que nunca les llevó una canasta de frutas cuando se mudaron. O sea que nunca fue a socializar cuando pasean a su perro - el tiene cosas más importantes que hacer, gente más importante que conocer. Si son contactos en la red, pero eso no les quita importancia. Si los vecinos conocieran gente en la red, entenderían.

Juega con la llave tratando de insertarla en el agujero. La maldita cosa siempre fue testaruda, pero realmente no le importa. Sólo le provee más tiempo para pensar. Finalmente la llave cede y se desliza en la cerradura y la puerta se abre. Ese sonido familiar... Es como un viejo amigo. Lo ha arrollado hasta dormir muchas más veces de las que puede recordar, y lo ha calmado después de muchos juicios y tribulaciones. Es la vibración del ventilador de la computadora.

Deja salir un suspiro y cuelga su chaqueta en el colgador. Las luces están apagadas, pero eso no importa - sólo ayuda a crear ambiente. Todo está bien para contemplación. El ruido del monitor entra en acción mientras es encendido y se sincroniza con el ventilador. Es una hermosa canción cantada a cappella que no muchos pueden apreciar.

Mientras la pantalla se torna blanca, abre el mensajero instantáneo de su elección. Sólo unos cuántos mensajes - nada importante. Luego navega por la web, visitando sus lugares conocidos - revisando las palabras y párrafos para información importante. Un mensaje por aquí, un email por allá - esta es su segunda vida. Una vez leyó un libro sobre personas que jugaban con el internet y lugares para chatear, y cómo afectaba sus vidas. Su mente divaga mientras recuerda un pasaje en particular...

Algunas personas que frecuentaban estos lugares para chatear fueron a ver el servidor en el que se encontraba. El cuarto en el que se hospedaba era hogar a muchas otras consolas hospedando Dios sabe qué. Cuando finalmente encontraron la caja beige que hospedaba el lugar de chat, un sentimiento de desprendimiento de la realidad apareció. Todo lo que había en sus vidas estaba en esa caja... El libro se llamó apropiadamente "Mi Diminuta Vida."

Vuelve de repente a la realidad. Qué estaba haciendo? Ah si... tratando de poner sus pensamientos en palabras. Porqué siempre siente la necesidad de hacer esto? Talvez es la necesidad de adquirir un entendimiento más profundo de porqué vive como lo hace - porqué elige relaciones en línea en vez de reales. Porqué es extrovertido en línea, mientras que bastante reservado en "el mundo real". Porqué compara su hobby con una adicción. No es tan malo verdad? No... no lo puede ser. Y qué si lo fuera? Importaría? No es como si se estuviera lastimando... De hecho, probablemente es bueno para el. Ha sido mejor gracias a él. Recobra información de alrededor del mundo, expande su vocabulario y amaestra sus habilidades para escribir. Seguramente estar en línea no puede ser malo para el. Pero siempre hay esa pizca de duda de nuevo...

No no... está dejando que sus arrepentimientos importen más que sus ideas. Seguro, podría haber tenido más citas aquí, salir más allá. Podría haber trabajando más en colegio, ser un estudiante modelo. Pero al final de cuentas, cuál es más importante? Vivir el estilo de vida, o ser exitoso. Algunos dicen que los dos caminan de la mano, pero el no. Veinte dólares al mes mantienen sus venas conectadas al pulso electrónico del mundo.

Dudas dudas dudas... Están ocupando lo mejor de el. De vuelta a las ideas! Pero cuáles son las ideas sobre su estilo de vida? No son los conflictos entre sobre lo que es la norma y lo que vive la misma naturaleza de las ideas? Ni siquiera sabe ya... necesita otro café.

Y así abre un documento nuevo de texto - como hizo muchas veces antes - y comienza a escribir. El puede o no mandar las palabras girando a la red. No ha decidido. Quizás pensaran que es extraño - torcido y fuera de toque con la realidad. O quizás recibirá alabanza por sus pensamientos por personas como el. Deja salir una risa rápida. A quién le importa? Nunca verás a la mayoría de estas personas de todos modos. Pero a el si le importa. Es más cercano a algunos de sus amigos en línea que lo que podría esperar con cualquiera en "la vida real".

"La vida real"... piensa sobre la popular frase por unos momentos y luego manda el texto abajo, abajo, abajo por la tubería que es la red. El tiene dos vidas, y espera encontrar su lugar en el mundo algún lugar en medio.

 

 

2004 :: Frank Veverka A. | Información