Soy un buen tipo...

Estaba parado sobre un precipicio gigante - el borde de algún cañón desconocido - el cual le daba un buen lugar para observar la destrucción que se producía a todo su alrededor. El aire hedía a madera quemada, plástico, y carne todo a la vez. Los olores fuertes y punzantes atacaban su nariz y lo obligaban a toser. Parecía que una poderosa bomba o algo había detonado. En todo su rango visual no se veía nada más que muerte y oscuridad; el cielo estaba lleno de humo y cenizas.

"Qué pasó?" el joven se preguntó a si mismo. Parecía como si no tuviera memoria de lo que pasó antes. Tenía la noción, inexplicablemente, que era en parte responsable por todo. Fue entonces que notó que estaba sosteniendo una caja metálica doblada y humeante en sus manos.

"Nos fuimos a la mierda, diría yo."

Miró a su izquierda y abajo para ver un pequeño robot plateado que parecía un barril con una lámpara encima. La lámpara tenía dos bulbos rojos brillantes que el suponía servían como ojos para la criatura artificial.

"Qué eres?" preguntó.

"Tu robot. En esta coyuntura, no tiene sentido entrar en más detalle."

"Yo hice todo esto, no es verdad? No recuerdo qué pasó exactamente, pero tengo una noción vaga que es todo por mi culpa. Cómo es que no recuerdo nada exactamente?"

"Ah, bueno, uds. humanos tienen una manera de bloquear eventos traumáticos. Eso es probablemente lo que pasó."

"Qué tan lejos llega esta destrucción?"

"Una gran distancia. Me deberías haber escuchado. Pero nunca lo hiciste realmente, verdad?"

"Pero no puedo ser responsable por esto. Quiero decir, soy un buen tipo... de verdad, lo soy. Todavía no puedo recordar nada, pero como sé que hice todo esto, también tengo la noción vaga que no soy el tipo de persona capaz de tanta maldad."

"Ud. está correcto en eso señor. Sin embargo, su capacidad para la estupidez no tiene comparación."

Miró hacia su vestimenta. Con todos sus huecos, desgarres y jalones sus zapatos, jeans, polera y abrigo parecían haber tenido mejores días. Lo que haya destruido todo alrededor suyo también había hecho su acto en su ropa.

"Qué exactamente pasó robot?" preguntó, "Me puedes decir por favor? No pareces tener los mismos problemas de memoria como yo."

"Oh, no tiene sentido entrar en todo eso ahora. Te diré que si tuvo algo que ver con esa caja que estás sosteniendo."

Miró abajo al pedazo de hierro dañado y quemado en sus manos. Estaba caliente - casi demasiado para sostenerlo. "Porqué sigues diciendo que no tiene sentido explicar cualquier cosa?"

"No hay tiempo señor. Vendrán a matarnos en cualquier momento."

"A mi? Pero soy un buen tipo, no merezco morir."

"Tu destruiste setenta y cinco por ciento de su planeta. Yo creo que ellos piensan que si lo mereces."

"Setenta y cinco porciento?! Cómo puede ser? Oh, Dios, todas esas vidas!"

Lo interrumpió un ruido cortante en el aire. Dirigió su mirada hacia arriba para ver seis figuras negras emergiendo del humo en la distancia. Mientras más se acercaban, parecían bombarderos stealth.

"Ah, aquí vienen. Bueno, fue particularmente desagradable conocerte. Es muy desafortunado que me vayan a volar en pedazos junto contigo. Te dije que no la abrieras. Pero querías escuchar? Nooo!"

"Nos van a disparar?" preguntó, comenzando a agitarse. Miró a su alrededor. Quería correr, pero no había a dónde.

"Me imaginaría que nos van a bombardear, y duro. Ojo por ojo y todo eso."

"Bombardear? Eso no sería sobre-matanza?" El ruido se acentuaba. El sonido sacudía el suelo por su intensidad. Causaba que sus dientes tiriten. Los aviones estaban casi en frente.

"Solo se quieren asegurar! Oh, hablando de bombas, aquí vienen ahora. Adiós señor."

Decenas de tubos negros comenzaron a llover del cielo, proyectando sus sombras en ellos que crecían más grandes y más grandes mientras las figuras bajaban hacia ellos. Aunque su descenso era agraciado, emitía un grito agudo sumamente molestoso que se hacía más fuerte mientras se acercaban. Los aviones rugían alejándose en la distancia a una velocidad muy alta.

"Hey," dijo, sacudiendo la caja, "Quizás si hay algo todavía en esta caja, podemos--"

2004 :: Frank Veverka A. | Información