La Mano Dura se ha convertido en un imaginario de facismo amistoso que permea todo el tejido social del archipiélago de Borikén. La Mano Dura no se límita al excesivo despliege de la policía y de la Guardia Nacional con sus herramientas de represión. Incluye, además, todo un imaginario del miedo que traza las coordenadas de la vida cotidiana. Cada ciudadan@ se ve entrampado en el entrejuego de la vigilancia y de la paranoia: ser vigilante y vigilado al mismo tiempo. Esa paranoia, esa práctica de vigilar/vigilado, esa clara demarcación entre el ell@s (el Otro, el criminal, la escoria) y el nosotr@s permean la sensibilidad colectiva del país.
Cuando ponemos un ojo en el Estado, la situación comienza a dar pavor. Ya no es suficiente señalar la violencia de los aparatos represivos del Estado, pues el Estado es en sí mismo un aparato de represión y violencia. Cuando hablamos de la crísis del agua el Estado se ababacha, se escabulla. Cuando hablamos de represión y violencia el estado se incha, lubrica, se excita, reconociendo que a estas alturas es para lo único que "sirve," lo único que sabe y le gusta hacer. Le produce placer. Un Estado vacío de ideas y carente de alternativas encuentra en la violencia la única salida a su propia verguenza.
De lo único que ha tenido razón el esposo de Maga en todo ésto es el haber planteado el asunto en términos de PACIENCIA, o más bien del agotamiento de la misma (cuando dijo: "nuestra paciencia se acabó"). Y es que ciertamente entrarle a la Mano Dura es entrarle a un asunto de PACIENCIA. Por nuestra parte decimos: "QUE LO SEPA EL ESPOSO DE MAGA, NUESTRA PACIENCIA SE ACABó." Y no es ni por capricho, ni por inclinaciones políticas; es que ya es simplemente inaguantable.
Hablemos sobre la Mano Dura, hablemos y gritemos. Hablemos de las invaciones a los caseríos y barriadas.
Hablemos de cómo la policía nos vé a nosotr@s l@s jóvenes, ya sea cuando nos paran en la calle, hacen su show en el Viejo San Juan, o nos bostean en la avenida o en la barra de la esquina.
Hablemos de ese Estado que confiscó los discos de Rap Underground y se atrevió a sugerir establecer como práctica el detener a quienes escuchasen ese tipo de música en la calle.
PERO, recordemos que esto se ha hecho pensando en nuestro bienestar...
Hablemos de cómo se intentó quitarnos el derecho a la fianza. Hablemos de cómo quieren que nos vigilemos uno a los otros y que andemos con vasos, en la cartera, en el carro, en el almuerzo, para pedirle muestras de orin a l@s que nos rodean.
Recordemos los macanazos que nos han contado que han llovido, los que hemos visto llover o los que nos han llovido a nosotr@as mism@s. Porque de macanazos y de empujones nunca ha habido racionamiento en el país y son tan poquitos de los que la gente se entera como son pocos los Barcelós y los Ferrés que los han recibido.
PERO, recordemos que esto se ha hecho pensando en nuestro bienestar....
Y es que no se puede olvidar que ser policía requiere también cierta habilidad. No todo el mundo puede dar macanazos y quitarse la placa al mismo tiempo y lucir la frondosidad del bigote frente a las cámaras de televisión como pasó en el Colegio Regional de Carolina hace unos meses.
Y si es díficil recordar lo pasado, pues miremos entonces a nuestro alrededor, observemos nuestro presente. Miremos la última pieza que intentan añadir al cuadro descrito hasta aquí: los toques de queda que comienzan a aflorar como afloran los gusanos en la podedumbre.
Los Boricuas Bestiales queremos documentar la violencia, la coerción, el miedo y la represión que han producido dichas políticas en el país. Para eso necesitamos de tu ayuda, tu memoria histórica, tus vivencias y narraciones.
Escríbenos... ayudanos a documentar cómo la Mano Dura afecta nuestra vida cotidiana.... Déjanos saber tus experiencias o anécdotas de cómo te ha afectado la Mano Dura, lo que piensas de dichas prácticas, preguntas que quizás otras personas te pueden contestar o simplemente lo que se te ocurra. Te invitamos a que dejes tu mensaje o colaboración en el libro que aparece abajo o que nos escribas a boricuas_bestiales@ibm.net.
Fotos: Bartolo Scanning System::Claridad