BATALLAS
En el eco ojival de mis transparencias
me diluyo en tu recuerdo...
Mis húmedos surcos navegables
afloran
en el intermitente canto de tus deseos.
Sumerges pistilos en mis labios abismales,
produciendo estertores capilares
me vuelvo tú cómplice
y convulsiona mi cuerpo en tu lecho.
En tus manos soy mar incontenible,
anhelos horizontales,
hembra previsible ante la presencia,
de innumerables goces.
Humedeces mis secretos escondidos.
Poro a poro se bañan mis fuegos seculares,
tiemblo, grito,
mareas sucesivas y salvajes
repertorio de conjunciones fulminantes.
embates fragorosos, ¡gemidos al unísono!
pulsaciones incontrolables del conjuro procreador
multiplicante
.
Descanso sobre tu piel ya sin quejas
despejada de líquidas sorpresas
en el devenir del tiempo,
tranquila, serena, iluminada
TE HAS IDO
Hoy me quisiera arrancar el alma,
te has ido,
la luz de la luna no besó tu cabello
esta noche,
se marchitaron mis rosas,
enegrecieron las violetas,
y el cielo enmudeció de frío
dejando tan solo el olor a fresco
en medio de mis doloridos muslos.
Si, te has ido,
ni un adios,
ni un beso,
ni una palabra de hastío;
el ambar de mi cuerpo
se tornó obscuro,
mi silueta se volvió de arena
y el fuego de mis senos
se convirtió en cenizas.
Si, te has ido,
no hubo despedidas,
ni lagrimas,
ni reproches,
ni los rigores del sexo
de la última noche;
no hubo nada,
y la fiebre que siente mi cuerpo contigo
lo tuve que apagar de un solo tajo,
beberme el agua amarga del olvido,
de tu infidelidad
y tratar de deterner el tiempo
justo antes de haberte conocido.
CUMBRE
Atada,
presa,
convicta de tu anhelo
me ajusto a la cintura la dulzura de tus besos.
Milagroso como ave nocturna
sobre mis sábanas rojas
cantas al filo de la noche los designios de
la luna.
Sometes mi cuerpo a dentelladas
poco a poco llegas hasta mi cumbre
abriendo camino con tus labios de seda.
Avanzas...
brilla un rayo de luz en la obscuridad.
Cedo...
ostento como trofeo en mi pubis
tu prodigio de bronce,
el tatuaje de tu boca.
Me diluyo en el ardor de tu lluvia
y juntos nos volvemos agua.
PALABRAS DE POETA
Palabras de poeta...
febriles amenazas de locura
venas cristalinas de purpúreos colores
reventando de dulzura o rasgadas de agonía.
Voces esmaltadas por el alba,
unen silencios con bullicio
risas con plegarias
amores, desamores
crepúsculo de noches sin días
lunas hinchadas de alegría
bajo el vientre dormido de una mujer.
Palabras de poeta...
sangre desfilando por la vida
amores cocidos a la carne
perseguidos desde el río hasta
la costa,
remansos de infieles memorias,
restos de naufragios
corrompidos de nostalgia.
Recuerdos que se doblan en el alma
padeciendo cascadas de venganza,
sobradas de ira y arrogancia.
Palabras de poeta...
vanidades de la vida
regadas en las venas de la tierra
en las altas montañas,
flotando sobre azules aguas,
viviendo en frondosos bosques,
haciendo caminos en las extensas planicies
del alma.
EN EL EXILIO
En el exilio...
¡cuántas palabras bastan
para formar un muro transparente
contra el olvido!
¡Cuántas imágenes viviendo
en sus mentes
el esplendor de un momento!
¡Cuántas noches de alcohol para
no pensar
en los dispersos huesos insepultos!
Y por tu patria y por tus héroes
viste yacer tantos muertos en las calles,
viste las tumbas de tu gente empolvadas,
de aquellos que engendraron en ti un ideal,
aquellos que murieron sin aviso,
sin réplica ni traba;
aquellos que ni la cárcel, ni
la muerte, ni el exilio
podrán su voz callar;
aquellos que como tú vivirán
en el exilio
y aprenderán a calentarse el corazón
tan solo de recuerdos
de una patria que nunca volverán a
mirar.
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