Eco. Guido Sánchez Yábar


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Artículos:

Envío de dinero: la medicina que alivia pero que no cura


La Casa Propia


Mitos del proceso empresarial.


La economía de la facilitación.


¿Qué son las competencias empresariales?


 

Envío de dinero: la medicina que alivia pero que no cura.

Imagine, por un momento, no tener que enviar más dinero a sus familias. Y no por que no lo necesiten sino por que ellos están produciendo sus propios ingresos. "No des pescado sino enseña a pescar", dice el refrán.

Una de las más grandes preocupaciones para nosotros los hispanos son nuestras familias que quedan en nuestros países. Esta preocupación se traduce en las penurias económicas que por falta de empleo sufren muchos de nuestros familiares. Es por ello que podemos ayudarlos de dos maneras: enviándoles dinero o ayudándolos a que vengan con nosotros.

Las posibilidades que nuestros familiares vengan es, por demás sabido, cada vez más difícil. Una serie de restricciones impiden que esto suceda. En consecuencia la mayoría de nosotros les enviamos dinero. La familia crece y la necesidades también. El dinero es insuficiente.

Es mucho dinero lo que los familiares envían a sus países. En algunos casos, las remesas, representan entre las principales fuentes de ingresos de los países. Mes a mes los envíos llegan a representar varios millones de dólares. Detrás de ese dinero existen historias de sacrificio. Las personas para ahorrar tienen que soportar una serie de privaciones a fin de poder enviar el dinero que tanta falta les hace a sus familias.

Las remesas y los envíos de dinero seguirán existiendo en la medida que nuestras familias necesiten este dinero para vivir o, simplemente, sobrevivir. De esta manera las familias reciben un alivio. No una solución para el problema económico que les aqueja.

Los envíos de dinero son como la medicina que alivia pero que no cura. Cuando existe la medicina usted esta aliviado. Pero que sucede si deja de tomar esta medicina, pues, sigue la enfermedad. Así, los envíos de dinero solo alivian el problema económico de nuestras familias. De ninguna manera son una solución.

¿Qué alternativas tenemos? Una muy interesante es que los envíos de dinero, a nuestras familias, se conviertan en dinero para invertir. Dinero para hacer más dinero. Si lo logramos no solo ya no tendremos que enviar más dinero a nuestras familias sino que ellos habrán aprendido a pescar. A generar sus propios ingresos. A generar su propio bienestar. A generar bienestar para nuestros países. A que el esfuerzo de enviar el dinero valga la pena.

Guido Sánchez Yábar
Publicado en el periódico "Gente de Minnesota" del 18 de marzo del 2003.
www.gentedeminnesota.com

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La casa propia

Todos soñamos con la casa propia. Cuando empezamos a ganar y ahorrar un poco comenzamos a soñar en la casa propia. Es un gran sueño. Sueño que se hará realidad con varios años de esfuerzo, dedicación y sacrificio. Sin duda la recompensa es grande: mi casa propia.

Sin embargo, alguien me hacia el siguiente comentario. Una casa representa muchos años de sacrificio. Por lo general, los mejores años de una pareja se lleva la construcción de la casa. Los años más productivos. Cuando los hijos están pequeños. Cuando podemos trabajar más. Compramos o construimos la casa. Una casa que no produce. Que al contrario demanda mantenimiento y pago de tributos. A no ser que la arrendemos y nos produce unas ganancias económicas.

Otras personas tienen otra prioridad: empezar con un negocio para que esa empresa con el tiempo le compre no sólo la casa soñada sino muchas otras cosas más. El razonamiento es el siguiente: los mejores años de mi vida los dedico a un negocio. A una inversión productiva y no improductiva. Si este negocio me produce haré realidad el sueño de la casa propia.

Es el caso de Pedro que vino con su joven esposa y alquilaron una tienda. Antes habían trabajado y ahorrado siempre soñando con el negocio propio. Después de hacer un estudio de que negocio poner se animaron a alquilar un local para una tienda. Vivian en la trastienda. Seguramente con una serie de incomodidades pero después de un tiempo comenzaron a ampliar el local. Luego se animaron a comprar el edificio y ahora el negocio les ha comprado una casa y están más seguros de seguir avanzando.

La decisión es difícil. Es cambiar de prioridades. Es cambiar nuestra forma de pensar. Generación tras generación hemos pensado igual. Les dejo la reflexión.

Guido Sánchez Yábar
Publicado en el periódico "Gente de Minnesota" del 1 de abril del 2003.
www.gentedeminnesota.com


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Mitos del proceso empresarial.

En torno al proceso empresarial se han creado una serie de mitos. Los siguientes son los más comunes.

1. Yo no nací para ser empresario.
Los empresarios no nacen como tales, los empresarios se hacen. Lo empresarial es aprendido. Lo empresarial es el resultado de adquirir y desarrollar un conjunto de habilidades. Así como una persona adquiere la habilidad del dominio de un nuevo idioma. Así podemos adquirir la habilidad de desarrollar una empresa.

2. El empleo es seguro, los negocios no lo son.
Este mito se ha arraigado a tal punto que inclusive los profesionales viven asustados por el fantasma de la pérdida del empleo. Este mito esta siendo cuestionado fuertemente ante la evidencia de los despidos, por diferentes causas, en las empresas en las últimas décadas. Aún así, muchas personas todavía se aferran a la esperanza de un empleo seguro.

3. Mi profesión no es para formar empresas.
En realidad lo determinante en el desarrollo empresarial son las actitudes, características y habilidades adquiridas más que los conocimientos. En este sentido la profesión es un complemento para el desarrollo empresarial. Es más. El desarrollo empresarial no es incompatible con el desarrollo profesional. Al contrario se complementan perfectamente. Es decir, cuando uno decide ser el promotor de una empresa no tiene por que sacrificar su desarrollo profesional, cualquiera sea esta.

4. Sin capital no puedo hacer empresa.
No empiezo el negocio por falta de capital. Ello no es cierto y más bien es una mala justificación para la inactividad. En general la mayoría de los empresarios requieren muy poco dinero en sus inicios y la mayoría de éste viene de ahorros y de recursos familiares. Existe evidencia de cómo muchas veces la abundancia de dinero más que una ayuda es un perjuicio, pues no se valoran las decisiones y se cometen grandes desperdicios económicos.

5. Los empresarios no planifican sino van haciendo las cosas.
"Si no haces un plan, tu plan fracasará. Si haces un plan puede que tu plan fracase". Los empresarios exitosos son muy cuidadosos con el proceso de planificación. Ellos, además, se fijan metas realistas. El cumplimiento progresivo de estas metas estimula a seguir metas cada vez más ambiciosas. Cuando el empresario se fija metas poco realistas y que no son cumplidas les genera frustración.

6. Sólo los fracasados hacen empresa.
Los empresarios son personas que no pudieron destacar en otros campos: bajo rendimiento académico, despedido del trabajo, que no encuentran empleo, son migrantes y no les queda otra alternativa que dedicarse a la actividad comercial. En realidad, los empresarios de éxito sueñan con el negocio propio y exitoso. Trabajan en ello. Diseñan un plan y se preparan para ello.

7. Con el primer negocio me enriquezco.
En la mayoría de los casos los empresarios exitosos lo son después de algunos, o varios intentos. Con gran frecuencia las personas esperan identificar un negocio que en poco tiempo les resuelva sus problemas económicos. No es así. Los empresarios persisten en el intento. "No tenemos fracasos, tenemos experiencias de aprendizaje". Aprender de los errores propios y ajenos. Estas experiencias los hace ser más cuidadosos y experimentados para las decisiones futuras.

8. Todo lo que se necesita es suerte.
Los empresarios no son arriesgados. Los empresarios primero miden y calculan el riesgo de las acciones que han de emprender y luego arriesgan. Dejan, prácticamente, ningún margen para el azar. Para la suerte. En todo caso la suerte, es la capacidad de ver y apreciar las oportunidades, es el trabajo serio que se hace en búsqueda de algo, es el aprovechar y maximizar épocas buenas y minimizar el impacto de las épocas malas.

9. En nuestro país no es posible hacer empresa.
Con mucha frecuencia se plantea cómo la situación económica, política, legal, y en general ambiental es difícil o poco favorable. En general es muy saludable un ambiente de estabilidad jurídica y económica para el desarrollo de las empresas. Sin embargo, es usual que en tiempos de crisis económica y social surgen empresas prósperas.

10. El apoyo del Gobierno al desarrollo de las empresas es insuficiente.
Los empresarios de éxito han desarrollado actividades en circunstancias muy adversas y con muy poco o ningún apoyo. El proteccionismo y, peor aún, el asistencialismo lo que propician son empresas obesas y poco competitivas.

Guido Sánchez Yábar

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La economía de la facilitación.

La confianza hace que los negocios y otras relaciones en la vida sean fáciles por la sencilla razón de que generan confianza entre los actores. La confianza se sustenta en el respeto de los compromisos.

No invierto y no hago negocios con tal empresa, municipio, institución o gobierno porque en cuanto cambian de administración desconocen los acuerdos y compromisos asumidos por el anterior gobierno. Esta es una de las afirmaciones más frecuentemente vertidas por inversionistas y empresarios. De esta manera se frustran muchas posibilidades de acuerdos comerciales, financiamiento y de inversión.

La confianza es fundamental en las relaciones humanas. Para el caso de la toma de decisiones de inversión, de transacciones comerciales, de crédito y cualquier otro tipo de trato que implique asignación de recursos, es indispensable que exista un mínimo nivel de confianza. Confianza en que las reglas sean estables, en que las personas e instituciones no cambien de parecer.

La falta de respeto a los compromisos se manifiesta de distintas maneras en nuestro quehacer empresarial: el contrabando, la copia, el plagio, la "piratería", la evasión tributaria y la absoluta falta de respeto a los derechos de los trabajadores son prácticas "normales". Nadie se avergüenza por ello.

Estas prácticas explican la "naturalidad" o soltura con la que no respetamos la propiedad intelectual de otras personas o, peor aún, nuestros compromisos y responsabilidades con el Estado y con los trabajadores. Estas prácticas, entonces, en vez de facilitar o incentivar la producción y el desarrollo producen un efecto contrario en la economía: el subdesarrollo.

En estas condiciones es muy difícil hacer empresa, proyectar una inversión o presentar un invento o, simplemente, un libro. Sin embargo, existen empresarios y grupos empresariales que se desarrollan justamente en estas economías: son los mercantilistas.

Se conoce a los mercantilistas como aquellas personas o grupos de personas que desarrollan actividades económicas y comerciales sólo si cuentan con algún tipo de tratamiento especial para el desarrollo de sus actividades: subsidios, exoneraciones tributarias, contratos especiales, monopolios y prácticas similares. Sólo así se animan a hacer empresa. Es por ello que algunos grupos empresariales se desarrollan de manera considerable con ciertos gobiernos y con el cambio de administración ceden su espacio a otros grupos.

En contraposición a este grupo existe otro: los emprendedores que con gran esfuerzo y laboriosidad, e incluso en condiciones muy adversas, hacen y desarrollan empresas exitosas. Los emprendedores, comerciantes y otros empresarios que desarrollan diversas actividades económicas se verán limitados en su desarrollo ante prácticas como el contrabando y algunos otros "privilegios", como los antes mencionados.

La igualdad de oportunidades estimula el desarrollo de empresas competitivas, creativas y con perspectiva de futuro. Ese es el tipo de empresarios y empresas que necesitamos. Es por ello que debemos crear condiciones tales que hagan las cosas (las inversiones) más fáciles, no más difíciles.

Guido Sánchez Yábar

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¿Qué son las competencias empresariales?

Los empresarios(as) se hacen o nacen? Existen suficientes razones para indicar que lo empresarial es una habilidad adquirida. Es decir los empresarios se hacen. Si esto es cierto, entonces: ¿qué se necesita para ser empresario? o mejor aún ¿cuáles son las "competencias" que distinguen a los empresarios?

Las "competencias" son el conjunto de requerimientos necesarios para el desempeño de una función. Son el conjunto de características personales innatas (naturales) o adquiridas (aprendidas) que hacen posible el desempeño acertado y eficiente de un puesto de trabajo dependiente o independiente. Las "competencias" desarrollan, en las personas, la capacidad de aplicar conocimientos y experiencias en la resolución de problemas y, así, poder hacer frente a situaciones concretas.

Desde este punto de vista las "competencias" integran tres tipos de saberes o aprendizajes: el saber o conocer, el saber hacer(las técnicas, destrezas y habilidades adquiridas) y el querer hacer (la aptitud o disposición natural para hacer las cosas).

En suma las "competencias" son la unión entre las características individuales y las cualidades requeridas para llevar a cabo misiones profesionales precisas. Cada uno de nosotros tiene un repertorio de comportamientos que nos facultan para desempeñar determinadas actividades.

Todo proyecto empresarial y toda organización empresarial sustenta su desarrollo en la capacidad que tenga de identificar, movilizar y potenciar las competencias personales de sus trabajadores.

Las características empresariales personales.

¿Tienen algo en común un comerciante exitoso de verduras y un banquero; un empresario latinoamericano y uno europeo? ¿Podemos, en este sentido, hablar de competencias empresariales personales? ¿Tienen los empresarios un patrón de comportamientos que los hagan diferentes de otros? Si esto es cierto, ¿cuáles son estos comportamientos? Finalmente, ¿son las competencias iguales para el caso de un administrador o de un gerente de empresas, que para un emprendedor?

Efectivamente, existen varios trabajos que indican que los empresarios tienen comportamientos particulares y cualquier programa de capacitación de futuros empresarios debería incorporarlos. Estos comportamientos son independientes a su formación profesional o técnica, a su condición económica, social, racial, o inclusive a su cociente intelectual; a su nacionalidad. Para "hacer" empresa se necesitan ciertas características y competencias (ver cuadros 1 y 2).

Así, un alto porcentaje de los ejecutivos mejor remunerados en los Estados Unidos proviene de las 10 mejores universidades de ese país. Sin embargo, para el caso de los emprendedores o empresarios esta situación es diferente. Los emprendedores provienen de las más diversas y variadas instituciones educativas o inclusive de realidades y países diferentes.

También es conocido que estas competencias empresariales son diferentes de las competencias que se requieren para desempeñarse como un administrador de empresas, ejecutivos o funcionarios (ver cuadro 3). Así podemos explicar por que buenos administradores de empresas no siempre resultan buenos emprendedores y al revés. Es decir, la formación y capacitación de empresarios o de futuros empresarios debe partir por identificar las competencias necesarias para que ello suceda.

Cuadro 1
Características empresariales personales. Estudios de McClelland

1. Capacidad de Logro

Búsqueda de Oportunidades
Identifica y actúa en busca de nuevas oportunidades de negocios o dentro del negocio.
Busca oportunidades inusuales para obtener financiamiento, equipos, terrenos, mano de obre o asesoramiento.

Persistencia
Toma acciones repetidas o diferentes para sobrepasar un obstáculo.
Hace un sacrificio personal o realiza un gasto extraordinario para completar un trabajo.
Se mantiene fiel a su propio juicio frente a la oposición o la falta de éxito inmediato.

Compromiso con el Contrato de Trabajo
Acepta plena responsabilidad por los problemas derivados en completar un trabajo para los clientes.
Permanece junto con los operarios o en su lugar para completar un trabajo.
Expresa su responsabilidad para la satisfacción del cliente.

Demanda por Calidad y Eficiencia
Actúa para alcanzar o sobrepasar los estándares existentes de excelencia o mejorar sus performances anteriores.
Se esfuerza para hacer las cosas mejor, más rápido y más barato.

Toma de Riesgos
Asume riesgos moderados.
De preferencia a situaciones que envuelvan riesgos moderados.

2. Capacidad de Planificación

Establecimiento e Metas
Establece objetivos claros y específicos a corto plazo.
Establece objetivos claros a largo plazo.

Búsqueda de Información
Busca personalmente informaciones acerca de clientes, proveedores y competidores.
Consulta especialistas en asesoría empresarial y técnica.
Utiliza contactos o redes de información para obtener información útil.

Planificación Sistemática y Control
" Desarrolla y usa una planificación lógica y escalonada para lograr sus objetivos.
" Evalúa alternativas.
" Controla el desarrollo de su empresa y pasa a una estrategia alternativa -si fuese necesario- para lograr sus objetivos.

3. Capacidad de Competencia

Persuasión y Elaboración de redes de apoyo
" Usa estrategias deliberadas para influenciar y persuadir a otros.
" Aprovecha contactos comerciales y personales para lograr sus objetivos.

Autoconfianza
" Posee una fuerte creencia en si misma y en sus habilidades.
" Expresa su autoconfianza acerca de sus habilidades frente a la necesidad de completar una tarea difícil o hacer rente a un desafío.

Tomado del Manual del Primer Taller de Formación Básica de Facilitadores en Metodología CEFE. PPME-MITINCI-GTZ.


Cuadro 2
Características del empresario. Estudios de Timmons.

Deseables y Adquiribles

- Compromiso total, determinación y perseverancia.
- Motivación al logro y al crecimiento.
- Orientación hacia la oportunidad.
- Toma de iniciativa.
- Responsabilidad personal.
- Capacidad para resolver problemas.
- Conocimiento verídico y sentido del humor.
- Búsqueda y uso de retroalimentación.
- Centro de control interno.
- Tolerancia por la ambigüedad, la presión y la incertidumbre.
- Toma y compartimiento de riesgos calculados.
- Baja necesidad de poder y status.
- Integridad y confiabilidad.
- Capacidad de decisión, sentido de urgencia y paciencia por el logro.
- Capacidad de trabajar y de aprovechar las fallas.
- Capacidad de conformar un grupo y construir héroes en el grupo.

Atributos no tan aprendibles
- Alta energía, buena salud, estabilidad emocional.
- Creatividad e innovación.
- Alta inteligencia y habilidad conceptual.
- Visión y capacidad de inspirar.

Actitudes y filosofías empresariales
- Imaginación sobre como hacer el trabajo.
- Todo es posible si usted piensa que lo puede hacer.
- Si usted no sabe que es imposible hacerlo, usted tratará de hacerlo y lo hará.
- La copa está a medio llenar, no medio vacía.
- Haga las cosas diferentes.
- Producir dinero es más divertido que gastarlo.
- Enorgullézcase de sus logros, es contagioso.
- Haga el papel más grande, no gaste tiempo tratando de cortar pequeñas
rebanadas.

Tomado de Varela, Rodrigo. Innovación Empresarial. ICESI, Cali, 1991, pp 93-95.

Cuadro 3
Tabla de presentación de competencias gerenciales.

Características personales
" Aproximación a los problemas: capacidad de analizar y sistematizar problemas complejos.
" Capacidad de Acción: capacidad de decidir dotándose de medios adaptados a los objetivos y a la dimensión de los problemas.
" Dominio de sí mismo: estabilidad emocional y confianza en sí mismo. Resistencia nerviosa y capacidad de aprovechar las experiencias.

Características en las relaciones con los demás
" Receptividad: disponibilidad. Apertura alas ideas de los demás. Flexibiliad de espíritu.
" Animador, sentido de equipo: saber hacerse comprender y saber asociar al equipo a las decisiones.
" Sentido moral: respeto y lealtad para con los demás. Responsable en sus compromisos.

Comportamiento dentro de la Empresa
" Inserción/ integración: respeto de la empresa. Inserción fácil en las redes de competencia. Adhesión a las normas y a los valores de la empresa.
" Fuerza de proposición: competencias reconocidas por sus iguales y por la jerarquía. Protagonista consiente de su papel y responsable ante su empresa.
" Capacidad de representar a la empresa en el exterior.

Tomado de L'essentiel de Management, junio de 1995.

Guido Sánchez Yábar
sysaperu@hotmail.com

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