En el caso de Lovecraft es algo muy sencillo: No se trata sólo de contar historias de terror, pues el
terror ya se ha tocado en muchas ocasiones por muchos contadores de ese tipo de historietas;
Poe, como el caso más espectacular, pues une el terror con la ciencia y la investigación, y el
delírium trémens adquirido con la bebida con las visiones producidas por ese alcohol. Luego están
otros muchos escritores de terror o de alucine total como son Lord Dunsany, Ambrose Pierce,
Robert W. Chambers, Arthur Machen y Algernon Blackwood. Digamos que estos son algunos de
los que precedieron a Lovecraft y son los que junto con él sintetizaron Los Mitos, famosos por una
serie de hechos que todos se unían en la idea de seres sobrehumanos o ultrahumanos de
existencia anterior a la humanidad, y de Dioses llegados de otras "partes".
Entonces de lo que se trata es de saber, que Lovecraft va más lejos aún y crea lo que se daría en
llamar el Horror Cósmico, no tanto quizá por lo "cósmico" de fuera, como por lo "cósmico" de
dentro, esto es, de dentro de uno mismo; todos los monstruos, todos los seres metahumanos,
todos los dioses existentes o no, TODO lo que puede hallarse dentro de los abismos de una
persona.
Claro, no todo el mundo tiene la capacidad de mirarse por dentro y ver lo que hay, entre otras
cosas porque el pánico que le puede entrar al que se atreva a hacerlo le puede perjudicar
gravemente y dejarlo lisiado mentalmente.
Es por esto dicho que a lo mejor los contadores, narradores y creadores de cuentos de terror
tienen una vida tan particular y excepcional y que se sale de toda regla. Viven otra realidad
totalmente diferente; ayer os contaba que Lovecraft cuenta de tal manera sus historias que al más
ingenuo de los lectores le puede engañar muy fácilmente y hacerle creer que Miskatonic existe
realmente, o que el Necronomicon, libro escrito supuestamente por el loco Abdul Alhazred, existe
verdaderamente y que puede ir a verlo a la Biblioteca General de la Universidad de California, o bien
a Toledo, en su gran y descomunal Archivo Documental. Y no, no lo encuentras.
En mi búsqueda de ese libro visité varias bibliotecas de varias ciudades españolas, y también algún
mercado de libro "viejo", y evidentemente no dio resultado alguno; en las bibliotecas estatales me
pedían el carné de periodista, y en los mercadillos de libro "viejo" me miraban con cara rara,
exceptuando en un puesto que me dijeron que sí, que sí que existía, pero había un poco de chanza
y sorna en sus palabras. Esto ocurría en la ciudad de Madrid, así que me fui a otra, Barcelona. Allí
me encontré con una especie de libro que así se titulaba "Necronomicon", me puse hasta nervioso.
Lo encontré en la Biblioteca de la Universidad de Barcelona, un lugar algo extraño y antiguo que
invitaba a buscar libros "prohibidos" y de dudosa existencia. Al final se trataba de un libro de
cuentos de Lovecraft donde se hacían muchas referencias al Necronomicon, pero sin más
misterios.
El caso es que entre Lovecraft y varios audaces más crearon nada menos que una Mitología de la
cual se puede dudar tanto como de cualquier otra, véase el caso de los Atlantes, o Mu, o los
Lemures, y tántos otros. Los mitos de Cthulhu son tan poco creíbles como los antes citados, o no.
¿Por qué dudar de Azathot, o Hastur el Inefable, que fue desterrado a las constelaciones de
Aldebarán, o Ithaqua, el que Camina en el Viento? Nada nos puede hacer dudar, pues todo en la
historia del hombre es incertidumbre y malversación histórica.
Pero no hay que asustarse, el horror sólo es una condición más de la existencia, y no está
totalmente estipulado que el horror sea algo maligno; hay gente que se siente horrorizada al ver a
alguien amando un piedra, o sencillamente queriendo con toda su alma a un animalillo de
compañía, u observando el brillo de un péndulo dorado de un reloj que no marca ninguna hora, pero
que el que lo mira ve todo el Universo reflejado en su brillo.
"""Yo he visto abrirse el tenebroso universo
Donde giran sin rumbo los negros planteas,
Donde giran en su horror ignorado
Sin orden, sin brillo y sin nombre""".
Némesis
Así están las cosas. Hasta mañana, que tengáis felices sueños.
No resulta complicado saber el por qué de la afinidad de algunos personajes de la historia con uno
mismo, y cada cual en su caso.
Ahora mismo está ocurriendo lo que ha ocurrido siempre desde tiempos inmemoriales; la Tierra, o
Arrakis, según se prefiera, vuelve a sentirse incómoda, y quiere volver a su antiguo estado de paz y
serenidad, que hay que empezar de nuevo, dicho en otras palabras.
Todos los dioses de toda la historia del pasado del presente y del Futuro están revolviéndose como
fieras, pero como fieras sabias, como fieras milenarias que son, y que no se detienen ante
penalidades de baja índole como son las humanas por muy duro que nos parezca.
Hay llamadas que hace la Vida, para que nos pongamos en alerta, si las hacemos caso podremos
actuar en consecuencia, si pensamos que sólo son supersticiones o malos augurios de alguien
pesimista, no saldremos del paso nunca jamás:
""" Esos grandes poderes o seres pueden
concebirse como una supervivencia...
la supervivencia de una época inmensamente
remota en que... la conciencia debía
manifestarse por medio de formas y figuras
que desaparecieron hace mucho tiempo
ante la progresiva oleada de la humanidad...
figuras de las que sólo la poesía y la
leyenda captaron su fugaz recuerdo llamándolas
dioses, monstruos, seres míticos de toda
suerte y especie..."""
Algernon Blackwood
Así es como comienza una de las historias más alucinantes de Lovecraft; La llamada de Cthulhu,
llena de sueños increíbles, de hechos sorprendentes de un remoto pasado que nadie logra imaginar
en toda su plenitud, pues quizá la cordura empezara a fallar a aquél que lo intentara.
El mundo no está en manos de los hombres ni muchísimo menos, creerse eso es de tontos, de
personas evidentemente desequilibradas que pretenden ser el ya pesado y arrogante "centro del
universo". Y no hace falta ser muy perspicaz para darse cuenta que eso se hace cada vez más real
y más evidente: Se nos va la electricidad y ya no hay nada que hacer, se corta el agua y lo mismo,
se acaba la gasolina, el fuel, -como lo queráis llamar- e ídem de lo mismo. Me impresiona mucho
pensar en eso porque cuando lo pienso se me viene a la cabeza la imagen de antiguos Imperios
donde nada de eso existía y sin embargo no paraban de evolucionar y de hacer una civilización
más digna y más respetable.
La humanidad tiene miedo, pero no hay de qué temer, todo está controlado, es una prueba más de
la Vida para ver quién es el vivo y quién es el muerto. Todo se conjuga de manera sincrónica; se
acaba el siglo, se acaba el milenio, -según nuestros calendarios y toda su diversidad- y empieza
algo nuevo, y en todo comienzo que se precie hay que comenzar de cero, o de diez, o de lo que
sea, también depende del nivel de evolución que se quiera conseguir.
"" A mi juicio, no hay cosa más digna de compasión en este mundo que la incapacidad de la
mente humana para poner en relación todo su contenido. Vivimos en un apacible islote de
ignorancia en medio de tenebrosos mares de infinitud, pero no fue concebido el ser humano para
viajar lejos "".
Y así es como continúa la historia de Lovecraft antes mencionada; La llamada de Cthulhu. Os la
recomiendo.
Hasta mañana.
El Mundo se agita, se retuerce, es como si quisiera despojarse de los parásitos, como un perro
rabioso por las pulgas. Nos lo ha dejado bien claro nuestra amiga Ana María de Montreal. El clima
es algo que sólo se podría controlar por medio de las mentes de los que dicen ser "seres
racionales", esto es, que el hombre, ese HOMBRE que siempre se dice que es sabio e inteligente
y sabe salir del paso ante todo peligro, pudiera controlar ese indómito fenómeno de la naturaleza
que es la meteorología. Pero no, el hombre prefiere resignarse y decir que así lo quiere fulanito o
menganito y a poner cara de pena y de lástima.
pá escribirme